Carlota Corredera cuenta que nunca perdió la esperanza en el amor: “Mis padres fueron una pareja que me demostraron que el amor de verdad existe (…) cuando me llegó el amor estaba preparada para recibirlo”. Aunque tardó en enamorarse, ya que lo hizo a los 36, asegura que mereció la pena: “No he encontrado a nadie que me haya querido como Carlos”.