Maite Roberto , nominada por el equipo de las chicas, y , nominado por los chicos, eran los primeros concursantes del 2009 que tendrían que enfrentarse al veredicto de la audiencia. El público siempre tiene la última palabra, y el destino de los dos concursantes estaba en sus manos. Aunque durante toda la semana hemos visto a sus familiares y amigos defendiéndolos por diferentes platós de la cadena, la suerte de los concursantes dependía de la decisión de los espectadores. La última hora desde el campamento no se hacía esperar, y Roberto se convertía en el primer expulsado de 'Supervivientes 2009'. "Ha sido una experiencia corta pero maravillosa. Mis compañeros son increíbles. Me hubiese encantado continuar , pero me llevo esta experiencia muy dentro y no los olvidare jamás", aseguraba el recién expulsado al conocer la noticia.
El que no se tomaba tan bien la noticia era su padre, que vio en las nominaciones de su hijo una burda excusa. "Hemos hecho todo lo que hemos podido, él no ha tenido tiempo tampoco para más. Es así el juego, es un juego y así es la cosa. Yo creo que se lo ha tomado bien. En su profesión ya ha estado acostumbrado a ser el segundo en algunas ocasiones. Quedó mister España en segundo lugar y yo sabía que hoy no se quedaba en la isla. Hombre, puedes decir que ha llegado el último, pero si el último hubiera sido otra persona igual no lo hubieran nominado. Si ves que alguien puede ser un rival pues lo puedes nominar por eso con la excusa de que es el último".
Antes de dejar el concurso para siempre, Roberto tenía que cumplir su última misión dentro de la isla, otorgar el beso de Judas (su último punto de nominación) a uno de sus compañeros. El modelo no se lo pensó ni un segundo a la hora de lanzarse , que se lo había pedido a gritos minutos antes "¡bésame en la boca!". sobre los labios de Iván
Ya fuera del poblado, donde sus compañeros no podían escucharle, tuvo la oportunidad de decir todo lo que pensaba. "Ya pasó todo y me siento bien, feliz. Yo siempre positivo. Si me ha pasado esto será porque otra cosa mejor está por venir. Que mi novia no se confunda, que aunque haya dado un beso a Iván que no se confunda. Para mí sería un orgullo si me voy porque creen que he sido un rival peligros, pero la verdad es que tengo la sensación de que la única razón para que me nominaran es que llegué el último y ellos tenían un poco más de conexión. Es una pena que alguien que se quiere ir siga aquí y uno que no quiere irse tenga que marcharse", se despedía uno de los expulsados que mejor se han tomado su salida del concurso.