Álvaro no para de piropear a Elena mientras ella le cura la herida que le ha hecho Nieves. Elena intenta no hacer caso de los comentarios del capataz, pero no puede impedir sentirse muy halagada. Nieves va corriendo a avisar a su padre con la intención de que los sorprenda, pero en lugar de ver a Elena y Álvaro, se encuentran a Isabel terminándole de curar.