Un jurado popular resolverá la culpabilidad de Raúl Díaz en el asesinato de su pareja Romina Celeste durante la Nochevieja de 2019 en Lanzarote. Fiscalía ha presentado cargos de homicidio, malos tratos, lesiones, simulación delito y profanación de cadáver contra el marido de Romina.
Este programa ha tenido acceso en exclusiva a la llamada que Raúl hizo a un primo confesando cómo se deshizo del cuerpo de Romina. Una semana después del asesinato de su mujer, Raúl confesó que quemó el cuerpo de Romina y contó su versión de los hechos es esta llamada, de 15 minutos, de la que el programa ha omitido detalles que hieren la sensibilidad para evitar el dolor de los familiares de la víctima.
En la primera parte de la llamada, cuenta cómo empezaron a discutir en la nochevieja y que él decide salir de la casa para que los vecinos no escuchen los gritos. Dice que está nervioso y que, según su relato, cuando regresa a la casa se encuentra a Romina sentada en el baño y sin vida.
El presunto asesino explica que se asusta y confiesa sin titubear cómo descuartiza el cuerpo de Romina, lo quema y se deshace de él distribuyéndolo por la isla. "Primero con la barbacoa, me tiro todo el día quemando a todo trapo". Explica que un vecino, preocupado, ha visto las llamas y él lo tranquiliza diciendo que no se trata de un incendio.
En la segunda parte de la llamada, inédita hasta el momento, Raúl explica que supuestamente se encuentra a Romina ya fallecida. El presunto asesino reconoce que no podía dejar rastro. "Lo meto todo en bolsas intentando que caiga lo menos posible al suelo". Después, intenta ocultar pistas que le incriminen, se deshace de la barbacoa dejándola en un contenedor. También describe cómo le descubren y es detenido una semana después del presunto asesinato. El cuerpo de Romina Celeste todavía no ha aparecido.