Alexia Rivas estalla ante las críticas por el patrimonio de su familia

La exconcursante de 'Supervivientes' está cansada de la que cuestionen por el patrimonio de su familia
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Alexia Rivas lleva más de un lustro trabajando en los medios de comunicación, desde que terminó la carrera de Periodismo tras darse cuenta de que lo suyo no era el Derecho, grado que comenzó a estudiar antes de darse cuenta de que quería apostar por su faceta como comunicadora. Pero pese a su sólida carrera como colaboradora en programas como 'Vamos a ver' o Fiesta', a la exconcursante de 'Supervivientes' la siguen cuestionando por el patrimonio de su familia.
La de Ponferrada nunca ha ocultado que su familia, en concreto su abuela paterna, es la dueña de Teletricsa, una empresa fundada en 1972 por su abuelo paterno, José Rivas, para la distribución de productos de Intercomunicación y Seguridad que comenzó operando en el noroeste peninsular, pero ahora trabaja en todo el territorio nacional. Tampoco que su abuela es propietaria de un chalet a pie de playa en la costa gallega.
Al recordar que se va a ir unos días a la casa de veraneo familiar, una seguidora le ha escrito un mensaje que ha molestado profundamente a la influencer: "Casa familiar en la playa, dos casas enormes en Ponferrada... Todos nos conocemos. Por si no lo sabes, las cuentas de las empresas son públicas y la de tus abuelos factura más de tres millones al año. ¡Así cualquiera vive, eh, otra cosa es tener que ganárselo!".
Alexia Rivas ha compartido este mensaje para mostrar su indignación y recordar que ha pasado "media vida estudiando" para cumplir su sueño, como hicieron sus familiares para lograr tener lo que ahora tienen. Ha explicado que ha hecho muchas prácticas cobrando 160 euros y que su abuelo comenzó arreglando "aparatos de todo tipo" antes de montar una empresa que opera ahora en toda España.
"Lo primero es que no tienen ni idea. Lo segundo: si fuera así, ¿qué? ¿Tengo que avergonzarme? 'Ojo que todos nos conocemos', dice. Como si tuviera que avergonzarme. Como si en mi familia fueran narcotraficantes. Vivimos en un país en el que la gente que trabaja 12-14 horas y ha hecho todo desde cero se tiene que avergonzar, es acojonante", ha escrito en sus stories la influencer, que está cansada de las críticas y de que la cuestionen por los millones de euros que facturaría supuestamente la empresa de su familia o por el patrimonio que muestra en Instagram que tienen.

