La historia completa de Alejandra Rubio y Carlos Agüera, el último amor de la hija de Terelu antes de Carlo Costanzia

Alejandra Rubio y Carlos Agüera protagonizaron una historia de amor de un año y medio que pasó por todas las fases posibles hasta su ruptura a finales de 2022
Malagueño, deportista y muy discreto: así es Carlos Agüera, el último novio de Alejandra Rubio
Antes de su actual relación con Carlo Costanzia, Alejandra Rubio vivió una intensa historia de amor con Carlos Agüera. Un romance que tuvo lugar entre 2021 y 2022, y que pasó por todas las fases posibles: un gran flechazo, momentos inolvidables en televisión, el apoyo de la familia, la aparición de las primeras grietas y una ruptura que, a pesar de ser definitiva, dio paso a una inesperada relación de amistad entre ambos.
La hija de Terelu Campos y Carlos Agüera comenzaron su relación en verano de 2021. Fue en el mes de agosto de ese año cuando Alejandra Rubio hizo pública su historia de amor con el joven malagueño a través de las redes sociales. La pareja se mostraba entusiasmada y muy enamorada, compartiendo imágenes y momentos de su día a día juntos. Para Alejandra, que siempre ha estado expuesta mediáticamente, esta nueva etapa parecía traerle estabilidad emocional, y no dudó en presentar a Carlos a sus seguidores como una figura muy importante en su vida en ese momento. También, decidió dar un paso más y habló de él públicamente en el programa 'Fiesta' como prueba de su amor.

Una relación seguida en televisión
La historia de Alejandra Rubio y Carlos Agüera también tuvo bastante interés en televisión. En uno de los programas de 'Fiesta', Carlos sorprendió a su entonces novia en pleno directo con un gesto muy romántico: le llevó un ramo de flores al plató, provocando una gran emoción tanto en la colaboradora como en el público. Ese detalle no solo mostró el nivel de implicación de Carlos en la relación, sino que también dejó claro que, aunque discreto, estaba dispuesto a acompañar a Alejandra incluso en su faceta más mediática. Una faceta que más tarde, se acabaría convirtiéndo en un motivo de peso para terminar con su idilio.

El apoyo incondicional de la familia Campos
Uno de los aspectos que más consolidó la relación fue la buena sintonía de Carlos con el entorno familiar de Alejandra. Terelu Campos, madre de la colaboradora, mantenía una relación muy cordial con él y lo consideraba una buena influencia para su hija. Además, el joven tuvo ocasión de conocer al padre de Alejandra Rubio, con quien también conectó de forma natural y muy positiva. Este vínculo familiar reforzó aún más la unión de la pareja, que durante un tiempo pareció estar en su mejor momento. Así, lo contó públicamente Alejandra Rubio durante uno de los programas de 'Fiesta', donde aseguró estar viviendo uno de los momentos personales más dulces de su vida.
Incluso, la pareja decidió ampliar la familia. A pesar de que Carlos Agüera era de Málaga y pasaba varios días seguidos en su tierra natal distanciado de Alejandra Rubio, la pareja se lanzó a adoptar a un gatito con el que formaron una pequeña familia. El felino, de apenas cuatro meses, fue adoptado en la protectora Patrulla Canina Madrid, a pesar de su corta edad, ya ha vivido el abandono y fue tirado a un patio con junto a dos de sus hermanos. En aquel momento, Alejandra Rubio estaba atravesando un momento complicado tras el fallecimiento repentino de Salem, uno de sus dos gatos junto a Magic, quien dejó un gran vacío en la colaboradora, ya que para ella son como sus "hijos".
Las primeras grietas de la relación y la ruptura entre Alejandra Rubio y Carlos Agüera
Pese a los buenos inicios, la relación no tardó en enfrentar sus primeros obstáculos apenas un año después. Una discusión en plena calle captada por las cámaras durante el 57 cumpleaños de Terelu Campos hizo saltar las alarmas y dejó ver que no todo era tan idílico como parecía entre la pareja. Poco después, Carlos Agüera se trasladó a Málaga, su ciudad natal, lo que introdujo la distancia física en la ecuación. A esto se sumó un creciente desgaste por la exposición mediática de Alejandra, algo que al joven no le terminaba de gustar. Según revelaron posteriormente fuentes cercanas, la presión del entorno y las diferencias de estilo de vida terminaron afectando de forma importante a la convivencia de la pareja.
A finales de 2022, Alejandra y Carlos decidieron poner fin a su relación. Según explicaron ellos mismos, la ruptura fue de mutuo acuerdo, sin terceras personas implicadas y con mucho cariño de por medio. "Han sido las diferencias de vida. Él no vivía aquí y se vino a vivir aquí, y adaptarse a una nueva vida es complicado. Al final mi vida es pública y la suya no", explicó Alejandra Rubio en 'Fiesta'. Pese a la separación, ambos dejaron claro que mantenían una buena relación y, de hecho, fueron vistos juntos meses después tras el fallecimiento de María Teresa Campos cuando Carlos le mostró su apoyo a la colaboradora. Aunque nunca retomaron su noviazgo, demostraron que es posible cerrar una etapa sentimental con respeto y cariño, continuando su camino por separado pero sin rencores.


