Las imágenes de Irene Rosales y Kiko Rivera en redes que ya presagiaban la ruptura: “No hay ninguna chispa emocional”
La experta en comunicación no verbal Paloma Ramón desgranó las imágenes con detalle en 'Tardear'
Una experta en comunicación no verbal, contundente ante las imágenes de Irene Rosales con un chico: “Muestra señales contradictorias”
En junio de 2025, Irene Rosales compartió un vídeo aparentemente inofensivo en sus redes sociales. Bajo el hashtag #broma, participaba en un reto viral que consistía en grabarse con la pareja y remarcar que era la “actual pareja”. Una tendencia divertida para algunos, pero que en el caso de Irene y Kiko Rivera hoy cobra un sentido muy distinto, tras conocerse su separación.
En el vídeo, Irene dice sonriente: “Aquí estoy con mi actual pareja”. La reacción de Kiko, sin embargo, habla por sí sola: mirada perdida, risa incómoda, cabeza que niega, ojos que se desvían en todas direcciones salvo hacia su mujer.
El análisis de una experta: señales que no engañan
En el plató de ‘Tardear’, la experta en comunicación no verbal Paloma Ramón desgranó las imágenes con detalle. Según explica, los gestos de Kiko transmiten un mensaje mucho más profundo que sus palabras:
“Está disociado de Irene, no gira su cuerpo hacia ella, su mirada está perdida. Cuando escucha ‘actual pareja’ su expresión cambia, aparece la rabia y empieza a negar con la cabeza. No lo hace como quien dice ‘eso no pasará’, sino como alguien que proyecta lo que puede ocurrir después”.
Para Paloma, ese “no digo nada” de Kiko esconde una resignación: “Cuando sube los ojos hacia arriba, empieza a imaginar su vida en solitario. El inconsciente va más rápido que el consciente, y esos microgestos acaban diciendo más que un discurso entero”.
La experta añadió un matiz en tono de broma: “Esta pareja en el vídeo muestra más desconexión que nosotros en el plató cuando se apagan las cámaras. Desconectados totales”.
La tristeza de Irene y el “me da igual” de Kiko
El análisis no se detuvo solo en Kiko, la experta también se fijó en Irene: “No sonríe de manera genuina. Sus ojos miran hacia abajo, transmiten tristeza. Parece disfrutar de la broma, pero en realidad no hay chispa emocional en su gesto”.
Mientras tanto, Kiko resta importancia con un gesto de hombros: “Ese encogimiento significa: ‘No me importa’. Como si dijera: hoy eres mi pareja, mañana ya veremos”.
¿Una broma o un aviso?
El 23 de junio, noche de San Juan, Irene publicó el vídeo sin imaginar que semanas después sería analizado como la antesala de su ruptura. En palabras de Paloma Ramón, más que una broma inocente, ese vídeo parecía el reflejo de una relación ya rota.
