Encuentran restos de ADN de al menos dos personas en la ropa que llevaba Helena Jubany cuando fue asesinada
El juez ha llamado a testificar en calidad de testigos a otras dos personas por el asesinato de Helena Jubany
La policía que investiga el asesinato de Helena ha encontrado dos perfiles de ADN distintos
21 años después imputan a Xavi por el asesinato de Helena Jubany en Sabadell
El caso por el asesinato de Helena Jubany que se reabrió 21 años después del asesinato de la joven con Xavi Jiménez como único imputado podría cambiar. La policía científica ha encontrado muestras de ADN de al menos dos personas en el jersey que Helena Jubany llevaba puesto el día que fue asesinada en 2001, por lo que la familia de la víctima no descarta que haya más implicados.
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Según ha informado el periodista Carles Porta, el informe determina que existe un perfil genético que mayoritariamente corresponde a una mujer, y que hay otro minoritario.
Por ahora, el único investigado, ha sido citado en los juzgados de Sabadell para hacerle una extracción de ADN para poder compararlo con las muestras recogidas de la ropa de la víctima. El juez que instruye el caso ordenó repetir las pruebas en mayo, que se encontraban bajo custodia judicial para compararlas con las de Jiménez, que quedó en libertad el pasado 22 de abril tras declarar ante el juez.
El juez llama a declarar a otras dos personas
El magistrado también ha llamado a testificar en calidad de testigos a otras dos personas. El juicio que se realizará de cara a septiembre sentará ante el juez al jefe de la Secció Natura de la Unió Excursionista de Sabadell (UES) y una persona del entorno de Jiménez, que podría aportar novedades sobre su coartada en la noche de los hechos.
El presunto asesino fue imputado por las pruebas caligráficas
Jiménez fue llamado a declarar por su presunta implicación por la muerte de Helena Jubany el 22 de abril, durante ese primer juicio el investigado eludió dar explicaciones sobre las pruebas caligráficas que lo incriminan en este asesinato, si bien ha asegurado que no es el autor de los anónimos. y, sólo respondiendo a su abogado, negó cualquier implicación en los hechos que acabaron con la vida de la bibliotecaria de Mataró.
Su declaración respondía a la presunta conexión establecida a partir del informe caligráfico de la policía española entre un correo electrónico que se obtuvo del disco duro del ordenador de Jubany y los anónimos que recibió los días 17 de septiembre y 9 de octubre de ese mismo 2001, que provendrían de personas diferentes.