El angustioso momento en que los migrantes que huían de Libia encuentran al pesquero de Santa Pola

Todo comenzó cuando un grupo de migrantes huía en una patera del acoso de una patrullera Libia, país del que intentaban huir. Las autoridades la interceptaron con unas 40 personas a bordo y entonces los migrantes se lanzaron al agua en un intento desesperado para escapar. Todo, ante la estupefacción de la tripulación del pesquero español 'Nuestra Madre Loreto', que se encontraba en ese preciso lugar y en ese justo instante.

De hecho, los libios subieron a su barco a 26 de los migrantes, mientras 12, a duras penas y con las fuerzas justas tras días de travesía a la deriva, se acercaron a nado hasta el barco español alcanzando la cubierta.

Ahora, y desde hace seis días, sobreviven en el ‘Nuestra Madre Loreto’ con un futuro incierto. Ni Italia ni Malta les acogen, mientras España negocia con Libia en busca de una solución. Pero los inmigrantes no quieren regresar al horror, y las ONGS advierten de que no es un puerto seguro.

La ciudad de Valencia se ha ofrecido a acogerlos, mientras continúa la angustiosa espera.

El Gobierno defiende que el pesquero español 'Nuestra madre de Loreto' debe desembarcar en Libia porque es el "puerto más seguro" ya que es el país que se encuentra más cerca del barco que el pasado jueves rescató a las doce personas en alta mar, a 80 millas de Libia. En este sentido, sostiene que "prima la seguridad" del pesquero y sus ocupantes "ante la amenaza de temporal".

Fuentes de Vicepresidencia rechazan que el pesquero se dirija a territorio español para desembarcar, teniendo en cuenta el temporal y fuerte oleaje que se prevé. "Es un barco pequeño y priman los criterios de seguridad", subrayan.

En esta línea, el Ejecutivo de Pedro Sánchez atribuye la responsabilidad de la acogida de los ocupantes al país más próximo. Según argumenta, de acuerdo a los tratados internacionales, el lugar del desembarco debe decidirse en función de la cercanía y por ello debe elegirse el puerto "cercano", que es "el más seguro".

Desde el Gobierno confirman las "negociaciones" que se están llevando a cabo con las autoridades libias para poder desembarcar a esta docena de personas que viajan a bordo del pesquero, con base en Santa Pola (Alicante). Eso sí, el objetivo es que se realice "con todas las "garantías".

En este contexto, las mismas fuentes de Vicepresidencia destacan que el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) está presente en el puerto para asistir a los migrantes que lleguen a Libia.

Distintas organizaciones rechazan el desembarco en Libia

Precisamente ACNUR ha cuestionado en reiteradas ocasiones que Libia sea un puerto seguro para el desembarco de migrantes y desaconseja los retornos a Libia tras los rescates en el mar. Por su parte, el Defensor del Pueblo en funciones, Francisco Fernández Marugán, ha iniciado una actuación de oficio ante el Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación para que valore la posibilidad de permitir el desembarco en territorio español de las personas que viajan en el barco 'Nuestra Madre de Loreto'.

El pasado mes de agosto, el Gobierno autorizó al buque 'Open Arms' --embarcación de la ONG española Proactiva Open Arms-- a desembarcar en el puerto de Algeciras (Cádiz) a los 87 inmigrantes y refugiados que rescató en aguas del Mediterráneo central. Entonces, el Ejecutivo aseguró que España respetaría "las leyes internacionales y acogería al buque de bandera española".

En julio, aceptó la petición de esta misma ONG de desembarcar en un puerto español --el de Palma-- con los cadáveres de una mujer y de un bebé, y con una mujer aún con vida que fueron encontrados en plena operación de rescate en el Mediterráneo central.