La hemos visto protagonizando numerosas portadas de revistas así como otras tantas sesiones de fotos. Sin embargo, esta vez Megan Fox ha tenido que compartir protagonismo con una réplica ficticia de sí misma: acompañada por un maniquí desnudo, Fox protagoniza una de sus sesiones de fotos más originales, elegantes y atrevidas hasta el momento.
En un fantástico trabajo realizado por el fotógrafo de moda británico Craig McDean, Megan Fox nos presenta su imagen más sofisticada y elegante pero cargada de sensualidad mientras juega y se encuentra frente a frente con su doble. Con un corte de pelo al estilo Cleopatra y un maquillaje muy ligero en el que se destacan los labios de la actriz, Megan y su clon son exageradamente parecidas.
Tanto que, aunque la revista en cuestión no ha querido desvelar el secreto, lo cierto es que varios medios apuntan a que la réplica ficticia de Fox podría ser en realidad ella misma después de varios retoques de photoshop para darle esa imagen de cuerpo inerte y caracterizarla como un auténtico maniquí. Sin embargo, tal y como publica US Magazine, al final de la sesión de fotos Megan pidió llevarse la cabeza de la maniquí a casa.
Arrepentida por mentir
La fotos vienen acompañadas por una no menos interesante entrevista de la actriz en la que no sólo confiesa ser una celosa de su intimidad, sino que, además, ha mentido en varias entrevistas con el fin de preservar desviar la atención mediática de su vida privada.
"En el pasado he sido muy reacia a compartir verdades sobre mí y a dejar a la gente entrar en mi vida ", explica Fox en la entrevista. "He dicho cosas para despistar a la gente sobre lo que realmente está pasando en mi vida. Así que, en parte, he ayudado a los medios a publicar esas ideas equivocadas (sobre mí), cosa de la que me arrepiento".
Por ello, confiesa haber aprendido la lección y afirma que, de momento, no volverá a "abrir la boca para hablar", ya que todo lo que dice "se convierte en un escándalo". "En este punto, no voy a preocuparme por engañar a la gente o por mantener las distancias. Todo esto no me lleva a nada", añade la actriz.
Con lo que más le ha costado convivir es con el constante acoso de los paparazzis. Megan explica en su entrevista que vaya a donde vaya siempre hay revuelo y "paranoia". "Siempre tenemos que fijarnos en unos coches específicos para saber si nos están siguiendo o haciendo fotos. Es insoportable y, a veces, incluso contradictorio".
A estas alturas de su vida, a sus 24 años y con una relación estable con el también actor Brian Austin Green, Fox afirma estar mucho más centrada en su vida personal que en su trabajo.
"Sinceramente, estoy mucho más centrada en mi vida personal. Me gustaría formar una familia en algún momento", explica la actriz. "No es que no esté centrada en mi carrera, por supuesto que lo estoy. Simplemente estoy en ese momento y lugar en el que prefiero pasar más tiempo en casa y con mi familia".
La próxima vez que podamos ver a Fox en la gran pantalla será en Jonah Hex, película que protagoniza junto a Josh Brolin y John Malkovich. IM
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