Miquel Mañé, subcampeón del mundo de gimnasia aeróbica: “La recompensa llega con trabajo y constancia”

  • Miquel se ha coronado subcampeón en el Campeonato Mundial celebrado en Portugal

  • Se dio a conocer con 15 años en 'Got Talent España' para dar visibilidad a esta disciplina tan minoritaria

  • Su mayor sueño es trabajar por las mañanas en un laboratorio y por las tardes ser entrenador

Miquel Mañé tiene 19 años y vive en Calafell (Tarragona). Se define como un joven hiperactivo. Empezó jugando a básquet, no tocaba la pelota y se pasaba el tiempo haciendo volteretas y ruedas. Las acrobacias le llevaron primero a la gimnasia artística, pero no fue hasta que llegó a la gimnasia aeróbica cuando descubrió su verdadera pasión. Con tan solo 18 años se proclamó campeón del mundo en Bakú (Azerbaiyán).

El último título que ha obtenido es plata individual en el Campeonato Mundial celebrado en Guimaraes (Portugal), este mes de junio. En 2018, con 15 años, deslumbró en 'Got Talent España', donde se presentó para dar visibilidad a esta disciplina poco conocida. Ahora combina su pasión con sus estudios de Bioquímica. 

Pregunta: ¿Cómo empezó tu afición por las acrobacias?

Respuesta: Siempre he sido un chico hiperactivo y muy movido. Primero empecé jugando a básquet, aunque hacía de todo menos tocar la pelota. Me pasaba el tiempo haciendo volteretas y ruedas. El entrenador se fijó y decidió avisar a mis padres para que me cambiaran a otro deporte. Fue entonces, cuando tenía 7 años, que me apuntaron a gimnasia artística.

P: Y te gustó. A las pruebas me remito...

R: Lo probé y me gustó bastante. Ahí hacía barras y saltaba al potro. Estuve tres años compitiendo a nivel nacional. Sin embargo, por ciertas circunstancias, sobre todo de motivación, acabé dejando este deporte. 

P: ¿Y el salto a la disciplina aeróbica?

R: Más tarde, cuando ya tenía 11 años. Una compañera del colegio me propuso ir a un campamento de verano para hacer gimnasia aeróbica. Así fue como me introduje en esta modalidad poco conocida, en la cual ya llevo siete años compitiendo. 

P: Con tan solo 19 años, has conseguido muchos títulos…

R: Sí, incluso a mí me cuesta asimilarlo. La recompensa llega con trabajo y constancia. He cumplido mi sueño, ya que al no tratarse de un deporte olímpico, mi máxima aspiración es competir en el Mundial Senior.

Me cuesta asimilarlo, pero la recompensa llega con trabajo y constancia

P: Campeón del mundo de gimnasia aeróbica y, de repente, decidiste presentarte a Got Talent para dejar al jurado con la boca abierta. 

R: Decidí presentarme en 2018 a las audiciones de Got Talent España para dar visibilidad a esta disciplina tan minoritaria y que está en el olvido. Me gustaría que se convirtiera en un deporte olímpico. Fue una experiencia muy bonita donde me lo pasé genial, aunque no llegué a pasar las eliminatorias.

P: Supongo que para llegar hasta este nivel de excelencia los entrenamientos son muy duros. ¿Y encima lo compaginas con tus estudios?

R: Sí, este año he empezado el grado de Bioquímica. Cada día me levanto a las 5 am para ir a la universidad. Cuando acabo las clases, voy a comer a casa y a las 16 h me voy a entrenar hasta las 19 h. Entreno aproximadamente unos seis días a la semana durante tres horas cada uno en el Club Gimnástica Calafell. Solamente puedo quedar con mis amigos cuando tengo un día libre.

P: Hablemos de objetivos...

R: Mi principal objetivo es acabar la carrera para dedicarme profesionalmente a esta rama. Esto no quita que deje de entrenar y competir en gimnasia aeróbica. Lo haré hasta que mi cuerpo me deje. La mayoría de nosotros no podemos vivir únicamente de este deporte, así que este es mi plan. En este deporte apenas hay compensación económica. La federación solo nos paga la medalla en el caso de que ganemos un Mundial Senior. Mi sueño sería trabajar por las mañanas en un laboratorio y por las tardes ser entrenador.  

P: Gracias.

R: ¡A vosotros!