El Gobierno declara la emergencia climática: las consecuencias legales que tiene

  • La agenda del Gobierno incluirá a partir de ahora la descarbonización total y la reducción de emisiones

  • Se buscará la producción de energía 100% renovable para 2050, y modificaciones en la educación, la economía, el transporte o el turismo

Primero fue la Comunidad de Madrid, después, Barcelona y Canarias y, este martes, el Gobierno de España ha declarado la emergencia climática. Es un término que escuchamos constantemente, para muchos es 'la expresión del año' (del 2019). Las organizaciones ecologistas la demandan y hasta el Parlamento Europeo se ha pronunciado en este respecto, pero pocas veces se conoce qué implica exactamente que una institución adopte este estado: ¿Qué va a cambiar?

La ciencia se ha pronunciado una y otra vez: los últimos seis años han sido los más cálidos a nivel mundial (el 2016 lidera la lista con una temperatura 0,94ºC más alta de lo normal, y 2019 le pisa los talones), y la superficie de hielo del Ártico y la Antártida es cada vez menor, lo cual se está reflejando en un paulatino aumento del nivel del mar.

En nuestro país, las inundaciones costeras son cada vez más frecuentes, las olas de calor se han disparado, y el plástico se multiplica en los ríos, especialmente en el Segura. Por ello, el Gobierno estrena desde este martes un nuevo estado, el de emergencia climática, que en teoría marcará su agenda a partir de ahora.

Descarbonización y reducción de emisiones

España acaba de poner el primer pie en el camino que lleva a la descarbonización y la reducción de emisiones contaminantes, o lo que es lo mismo, la producción de energía mediante renovables al 100%. Pero eso no es todo.

Por ahora, el nuevo Ejecutivo se ha propuesto conseguir lo siguiente en los próximos cien días: adoptar compromisos específicos en esta senda, promover la Ley de Cambio Climático, definir el corto y medio plazo para la descarbonización, crear una Asamblea Ciudadana como la francesa, e integrar la transición energética en la economía, con la transformación de los sectores industrial, agrario y servicios.

Pero estos son sólo 5 de los 30 objetivos que se ha marcado. En los próximos años, hasta 2050, España estará inmersa en un proyecto ambicioso que, de salir según lo previsto, tendrá también su reflejo en la educación, la sanidad, la innovación, el transporte, la fiscalidad y el turismo.

Educación, sanidad, innovación, transporte y turismo, en la agenda política 'sostenible'

En resumen, se buscará un Plan de Acción de Educación Ambiental para la Sostenibilidad antes de que finalice el 2020, así como un Plan Nacional de Salud y Medio Ambiente en el mismo margen de tiempo.

La Estrategia Española de Ciencia, Tecnología e Innovación 2021-2027 se esforzará por conocer y responder mejor los efectos de la crisis climática, con el fin de evitar desastres masivos como el reciente en el Mar Menor, que dio lugar a la muerte por asfixia de miles de peces y moluscos a causa de la falta de oxígeno en la laguna.

Se establecerán zonas de bajas emisiones en municipios de menos de 50.000 habitantes y se aprobará una Ley de Movilidad Sostenible y Financiación del Transporte Público que promoverá el desplazamiento menos contaminante.

La sostenibilidad pasará a entrar en el juego fiscal. O lo que es lo mismo, no se autorizarán exploraciones ni explotaciones que dañen nuestro medio ambiente, ni se favorecerá la producción energética con combustible fósil. Ciao, diésel.

Por último, el Ejecutivo desarrollará para 2030 una Estrategia de Turismo Sostenible. La afluencia de personas es positiva en general para la economía y el empleo, pero es cierto que, como contrapartida, resulta en la destrucción de paisajes, el incremento de consumo de agua y de energía, la alteración de algunos ecosistemas por ejemplo con la introducción de especies exóticas y en una mayor generación de aguas residuales.

Foro de Davos

El Foro de Davos (Foro Económico Mundial) que reúne a los líderes mundiales de Naciones Unidas, de la Unión Europea, jefes de empresas importantes y otros invitados que pueden comprar su asistencia, se celebra en Suiza desde el martes 21 de enero. Entre los posibles asistentes más mediáticos estarán Greta Thunberg y Donald Trump (¿veremos a la joven activista dirigir al presidente de EEUU otra mirada con intenciones como la de la cumbre de Nueva York?).

Amnistía Internacional ha emitido una declaración en la que establece que "Las personas con capacidad de decisión que asisten al Foro Económico Mundial de Davos esta semana deben transformar nuestro sistema económico alejándolo de los combustibles fósiles antes de que finalice la década para prevenir el caos climático". Pero ¿lo harán?

Por el momento, algunas entidades como BBVA ya se han pronunciado en esta línea: "En 2020, Davos reestrena manifiesto y se marca un único objetivo: construir un mundo más sostenible e inclusivo".

A nuestro presidente, Pedro Sánchez, ya le llueven las críticas por su desplazamiento a Ginebra a bordo del Falcon después de declarar la emergencia climática.