La Generación Z, el nuevo reto de la IA: "Que no entienda cómo hablamos supone un problema y un riesgo"
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La inteligencia artificial ha llegado para quedarse, y lo está haciendo en tiempo récord de cara a su implementación. Recordemos que la IA generativa —de la mano de chatGPT— eclosionó en 2022, y desde entonces, cada vez más son las personas que utilizan esta tecnología para manejarse por internet, y las generaciones más jóvenes no son una excepción.
Cuando se trata de interactuar con algoritmos mediante lenguaje natural, no obstante, se produce una paradoja. Cierto es que las diferentes apps y servicios que están a nuestra disposición están de cada vez más conectados a la red —y, por ende, cuentan con más datos para perfeccionar sus respuestas—. Pero entre la inmensidad de la red, un estudio pionero detectó que la IA no es capaz de entender muchas de las expresiones que la Generación Z utiliza para comunicarse.
Desde Informativos Telecinco hemos entrevistado a la investigadora de la Universidad de Diseño y Tecnología de Madrid (UDIT), Sandra Garrido, quién aporta varios datos clave para comprender este fenómeno.
“Si la IA nos deja de entender, es un problema”
La investigadora señala que “si la IA no nos entiende, supone un problema y un riesgo. Si no es capaz de comprender parte de las instrucciones que le damos, nos puede dar como resultado algo que es completamente erróneo, información que está equivocada o responder con un tema que es completamente diferente del asunto por el que es preguntado”.
Las generaciones más jóvenes, de acuerdo con Sandra Garrido, son las que más expresiones coloquiales y de jerga usan. Pero, además, estas van cambiando muy rápidamente. Si se parte de la premisa de que la IA se alimenta de los datos que están en la inmensidad de internet, se abre este escenario ya que “simplemente no hay la cantidad de datos de este tipo que la IA requiere para tener un buen aprendizaje”, señala.
La comprensión de la IA va más allá del lenguaje de la Generación Z
Aunque el foco de esta investigación primigenia es la Generación Z y las expresiones coloquiales, Sandra Garrido va un paso más allá al respecto de la comprensión de la IA: “No solamente existe esta brecha generacional. Personas de más de 50 años de edad y que son ajenas al mundo de la tecnología no entienden la IA porque esta evoluciona muy rápido, son muchas las cosas que hay que tener en cuenta a la hora de manejarla correctamente y esto acaba por provocar una incomprensión sistémica y de la esencia de la propia tecnología”.
Apunta a que la alfabetización que se requiere también pasa por un cambio en el formato del sistema educativo: “todos ya sabemos lo que es internet. Ahora el capítulo que se ha de enseñar es cómo comunicarse con la IA, porque de lo contrario estaremos abriendo más la brecha de incomprensión y de rechazo”.
¿Cómo se puede solucionar el problema?
A pesar de este contexto que está aflorando, la experta ilustra unas primeras pistas para empezar a abordar esta problemática. De cara a las generaciones más jóvenes aboga por un “saber estar” en tanto al registro de comunicación: “No es lo mismo hacer una búsqueda en internet, que hablar con el profesorado por correo electrónico que tomarse una bebida en un bar. El registro comunicativo cambia diametralmente, cosa que en las generaciones más jóvenes es un elemento que se desdibuja. Por lo tanto, lo idóneo es que se empiece a tomar consciencia del registro que se ha de usar, para así facilitar la comunicación”.
De cara a las generaciones anteriores, Garrido se muestra firme: “es necesaria una alfabetización por parte de todos. No puede ser que los mensajes que calen más profundos vayan siempre en la línea de la destrucción y del colapso. Se ha de poner en valor tanto lo bueno como lo malo, y se ha de hacer llegar el mensaje de que la IA es una tecnología que, bien usada, nos va a traer muchos más beneficios de los costes que pueda tener”, concluye.