Líridas 2022: cuál es la mejor noche de abril para ver la lluvia de estrellas

Esta semana veremos un puñado de estrellas fugaces cruzar el cielo de madrugada. Se trata de las Líridas, una lluvia de meteoros que se conoce desde hace 2.700 años, y que alcanza su pico de actividad siempre por estas fechas. ¿Cuál es la mejor noche para verlas?

La lluvia de meteoros de las Líridas es visible desde el hemisferio norte entre el 16 y el 25 de abril, con una tasa media de 20 estrellas fugaces por hora, por lo que no es la más numerosa del año, aunque algunos años se ha registrado un “estallido” con hasta 100 meteoros observables.

¿Cuál es la mejor noche para ver las Líridas 2022?

La máxima actividad de las Líridas cae este año en la noche del Día de la Tierra, la del viernes 22 de abril. Esa noche habrá que estar atentos tras la puesta de sol, que se produce en torno a las 21 horas en esta época del año.

Aunque habrá un impedimento para observar las estrellas en esta ocasión: la brillante luna en fase de cuarto creciente, con la mitad de su superficie todavía iluminada. Esto podrá entorpecer la vista de los destellos de las Líridas.

Para asegurarte una vista más despejada y tener más probabilidades de ver las estrellas fugaces, aléjate de la contaminación lumínica de las farolas y edificios, y busca un lugar apartado, sin obstáculos a la vista. Dirige la mirada en la dirección opuesta a la luna para buscar un cielo más oscuro.

Por lo general, las Líridas se ven mejor durante la segunda mitad de la noche. Procura hacerlo ante de que amanezca temprano, por estas fechas ya en torno a las 7:30 horas de la mañana.

¿Por qué sucede la lluvia de estrellas?

Los meteoros de las Líridas son fragmentos del cometa C/1861 G1 (Thatcher), un cometa de largo periodo que orbita alrededor del Sol una vez cada 415 años, según explica el Observatorio Astronómico Nacional.

Todos los años por estas fechas, la Tierra atraviesa un anillo poblado con fragmentos desprendidos del cometa Thatcher, que conocemos como meteoroides. Estos fragmentos del cometa impactan en la atmósfera terrestre y se calcinan por la fricción con el aire, creando así el resplandor luminoso que conocemos como meteoro o estrella fugaz.

Los registros más antiguos de las Líridas se conservan en el libro chino de crónicas Zuo Zhuan y datan del año 687 a.C.

Las lluvias de meteoros parecen tener un único centro de origen, un punto del que parecen surgir todas las estrellas fugaces. Ese punto se denomina "radiante" y su localización se utiliza para nombrar a la lluvia de estrellas. Las Líridas tienen su radiante en la constelación de Lyra.