Llegan las gemínidas, la última lluvia de estrellas del año: se podrían ver hasta 120 meteoros por hora

eltiempohoy.es 13/12/2018 13:13

Las Gemínidas son, junto a las Perseidas, la mayor lluvia de estrellas del año. Durante su punto álgido (las noches del jueves 13 y del viernes 14 de diciembre) se pueden ver 120 meteoros, aunque para eso, además de paciencia, necesitarás alejarte de la contaminación lumínica y buscar un lugar que sea cuanto más oscuro, mejor.

La NASA las considera una de las mejores lluvias de meteoros visibles desde la Tierra. Y no es de extrañar: son más lentos que las Perseidas y tienen un color amarillo especialmente brillante.

¿Dónde podrán verse?

Serán visibles desde ambos hemisferios (mejor desde el Hemisferio Norte, donde la actividad será mayor) y, gracias a la posición de la Luna –que estará en cuarto creciente, con forma de D– podrá verse alrededor de un meteoro cada dos minutos si encuentras un sitio con el horizonte despejado, es decir, mejor en el campo que en la ciudad.

Además, varios observatorios se ponen de acuerdo para retransmitir la noche del viernes la lluvia de Gemínidas en directo con el objetivo de denunciar el impacto negativo de la luz artificial. Son los observatorios enmarcados en el proyecto STARS4ALL (que podría traducirse como 'estrellas para todos'): el Observatorio del Teide (Tenerife), el de Altas Energías HESS (Namibia) y el del municipio de Olivenza (Badajoz). Si estás interesado, el canal sky-live.tv será el encargado de retransmitir la señal de estos observatorios a partir de las 22:30 hora peninsular.

Si son meteoros, ¿cuál es entonces su origen?

Se cree que provienen de un pequeño asteroide llamado 3200 Faetón que aún es un misterio para los astrónomos. Faetón se descubrió en 1983 y, aunque ha habido muchas teorías, se concluye que es algo así como un cometa rocoso, según la Universidad de UCLA (en Los Ángeles).

El polvo que emite Faetón queda en la atmósfera y, al orbitar nuestro planeta por su camino, impacta contra la atmósfera terrestre y se queman. Al hacerlo nosotros lo percibimos como estrellas fugaces aunque realidad son eso, trocitos de un asteroide cercano a la Tierra.