Shishmaref y otros pueblos de Alaska que quieren 'mudarse' por el cambio climático

Elsa Alonso 22/08/2016 17:04

La temperatura en el estado de Alaska ha aumentado en tan solo cincuenta años hasta dos y tres grados… ¡más del doble de la media del resto del planeta! Esto hace que la capa superficial de hielo se derrita y no proteja a las costas de la violencia de las tormentas. Todo un desastre para más de 180 pueblos, que ven sus hogares afectados por la erosión del terreno y las inundaciones.

Los datos son alarmantes. Un informe de Administración estadounidense determina que un 86% de las comunidades se halla en peligro por los efectos del cambio climático, y 24 de estos pueblos necesita una reubicación inmediata.

Shishmaref, la última comunidad en votar su reubicación

Con cinco kilómetros de largo, y menos de medio de ancho, esta isla cobija a una población esquimal Iñupiaq de 560 habitantes. El viernes la población acudía a las urnas para valorar la posible reubicación de los autóctonos a una zona segura, y es que trece viviendas ya habían tenido que ser desalojadas por estar muy cercanas a la costa, y ganó el sí por poco.

La situación lo merece. El Mar de Bering sigue creciendo a costa de 'comerse' más de un kilómetro de terreno de la isla y el Departamento de Interior va a abonar los 180 millones de dólares que cuesta esta operación. La economía de Shishmaref está basada en la caza y la pesca y es muy débil, por lo que en 2002 este proceso de traslado no se pudo llevar a cabo a pesar de la aprobación de la mayoría de sus habitantes.

La isla Kivalina desaparecerá por completo en 2025

La gruesa capa de hielo o permafrost, que protegía la costa de esta isleta, está desapareciendo y la fina línea de arena que se extendía en el Mar de Bering se ha estrechado notablemente.

En 2008, se intentó poner un parche al problema: el cuerpo de ingenieros del Ejército de Estados Unidos construyó un muro defensivo para delinear la costa de manera que el hielo derretido no cubriese más Kivalina. Pero esto solo ganó la primera batalla.

Una feroz tormenta en 2014 provocó la evacuación de los 400 indígenas de la población inuita. A día de hoy, los ingenieros valoran la habitabilidad de Kivalina y no dan ni diez años de vida a la isla.

Barrow, la "ciudad de la ciencia" del Ártico

La comunidad Barrow es el centro de investigación de muchos científicos que intentan conocer mejor los efectos del calentamiento global. En 2013, el caudal de datos que ofreció fueron desalentadores: la capa de hielo que cubre la costa disminuyó más de un metro de grosor.

El hielo marino comenzó a derretirse y a romperse. Aunque luego volvió a solidificarse, el permafrost era muy delgado.

El ámbito más afectado fue la economía: la tribu Inupiat que allí reside se dedica a la caza de ballenas y focas y, hace tres años, fue imposible conseguir ninguna. El hielo era tan inestable que los cazadores no pudieron arrastrar sus botes.

Isla de Jean Charles

Lo que eran árboles frondosos y tierra verde y fértil se ha convertido en un auténtico solar. Esta isla al sur de Louisiana ha vivido una historia parecida a la de Shishmaref. La población indígena se vio obligada a decidir entre su hogar o su supervivencia en una situación de máxima peligrosidad.

En 60 años, el territorio se ha reducido notablemente por la crecida de las aguas del Golfo de México… ¡hasta un 98%! Esto significa que ha pasado de tener 17 humildes kilómetros de longitud a contar con 3,2 kilómetros.

El Departamento de Vivienda y Desarrollo Urbano cedió 48 millones de dólares al traslado de 25 familias que ya no tenían hogar.

Newtok, su esperanza de vida es la más corta

El Mar de Bering está 'tragándose' literalmente Newtok. Tres años quedan para que el punto más alto de la isla quede sumergido bajo el agua. El río Ninglick, que rodea Newtok, sufre crecidas que inundan la villa y la capa de hielo está derritiéndose.

El conflicto político interno y la congelación de fondos del gobierno en 2013 impidieron la reubicación de sus habitantes. Pero, a día de hoy, el proceso de búsqueda de un nuevo sitio, a través de la red de agencias estatales para recoger fondos, se ha reactivado y parece que la posibilidad de reubicar a sus 350 autóctonos es muy probable.