Cómo instalar una estufa de pellets en un piso

Debido a la crisis energética que está viviendo actualmente nuestro país y al aumento de los precios tanto del gas como de la electricidad, muchos usuarios han decidido buscar alternativas para este próximo invierno y evitar pasar frío o arruinarse poniendo la calefacción. 

Un ejemplo de estas opciones más económicas son los pellets, un combustible de biomasa hecho de madera de pino comprimida el cual puede suponer un ahorro del 50% en la factura de muchas familias españolas.

Ahora bien, aunque el precio de este material  también ha subido, este combustible ya supone poco más del 15% de la calefacción en España. Si no formas parte de ese porcentaje pero te lo estás planteando, en este artículo te explicamos qué necesitas para poder instalar una estufa de pellets en tu piso y cómo hacerlo.

Punto número uno: hay que cumplir las normativas 

Aunque este tipo de estufas están pensadas, sobre todo, para viviendas unifamiliares, también es posible disfrutarlas en un piso. Ahora bien, hay que tener en cuenta algunos aspectos y detalles para que éstas funcionen correctamente y que, al mismo tiempo, no supongan un peligro.

Para la instalación de este tipo de estufas se debe atender a la normativa vigente referente a este equipo doméstico y a su vez, en el caso que se resida en un edificio, contar con la aprobación de la comunidad de vecinos. Tal y como indica el artículo 7 de la Ley de la Propiedad Horizontal, “el propietario podrá hacer modificaciones cuando no altere la seguridad del edificio o perjudique los derechos de otros propietarios, debiendo dar cuenta de tales obras previamente a quien represente la comunidad”.

No obstante, esta no es la única normativa que hay que tener en cuenta. Según especifica el RITE (Reglamento de Instalaciones Térmicas en los Edificios), cualquier equipo que genere combustible debe contar, de manera obligatoria, con una salida de humos en el tejado cuya chimenea sobrepase, como mínimo, dos metros la altura de los edificios circundantes.

Punto número dos: saber dónde y cómo instalar la estufa

Una vez se cumpla con las normativas, sí existe la posibilidad de plantear la instalación de este equipo doméstico. Ahora bien, la ubicación escogida para la colocación de estas estufas, catalogadas como más sostenibles, también es importante. Para ello, hay que tener en cuenta los siguientes aspectos:

  • Escoge el lugar más adecuado. Se recomienda colocar la estufa cerca de una pared exterior, algo que va a facilitar la instalación del tubo vertical de evacuación por la fachada hacia la cubierta.
  • Ojo con el suelo. Se debe instalar la estufa sobre una chapa de acero, de cristal templado o láminas aislantes en el caso que el suelo de la vivienda sea de madera. Este ‘añadido’ va a evitar que el parquet sufra y a su vez prevenir posibles riesgos.

Teniendo en cuenta estos puntos ya se puede proceder a su instalación:

  1. Perforar el hueco de la salida de humos. Previamente a ello, se recomienda señalar con un lápiz dónde se va a colocar esa salida.
  2. Instalar la tubería horizontal de evacuación que va a llegar al exterior de la fachada.
  3. Colocar las tuberías verticales para unirlas con las anteriores citadas. Es importante que estas se instalen separadas de la pared del edificio.
  4. Conectar y cargar la estufa con la cantidad de pellets recomendada en función de la marca y las dimensiones de ésta.

Ahora bien, en NIUS te recomendamos acudir a un profesional especializado en este tipo de combustibles para que se encargue de la instalación y sobre todo te asesore sobre qué tipo de estufa es la más apropiada y qué potencia escoger en función de la necesidad y las características de la vivienda.