¿Cómo limpiar el teclado del ordenador de una manera rápida y sencilla?

Los teclados y los ratones de los ordenadores y portátiles son dos de los objetos usados con mayor frecuencia en nuestro día a día, tanto en el hogar como en nuestro entorno de trabajo, llegando incluso a compartirlos con otras personas.

Por ello, realizar una limpieza regular y a conciencia es una manera de eliminar la suciedad y de prolongar su usabilidad, así como de mantener la higiene. Las pautas que podemos seguir para crear un espacio más seguro y libre de virus y bacterias son muy sencillas.

Cómo limpiar y desinfectar el teclado del ordenador

Lo primero que debemos hacer para limpiar tanto el teclado del ordenador como el ratón es desenchufarlo o tener el ordenador apagado. Si tu teclado es inalámbrico, retira las pilas, sobre todo si vas a realizar una limpieza en profundidad.

Una vez desconectado, dale la vuelta y zarandéalo para dejar caer toda la suciedad. Si hay mucha, no tardaremos en ver los posibles restos de comida, pelos o motas de polvo. Eso sí, no lo golpees; no por ello conseguiremos que quede más limpio y además puedes dañarlo.

A continuación, bastará con hacernos con una bayeta de microfibra o un algodón y un poco de alcohol isopropílico del 70% (también funciona alcohol de 90º) mezclado con agua para limpiar la superficie. Es importante no excederse con el uso del alcohol y humedecer la bayeta lo suficiente para no dejar gotas en la superficie.

Para una limpieza en profundidad, se pueden utilizar un spray de aire comprimido y un bastoncillo de oídos mojado con la mezcla de alcohol y agua para pasarlo entre las teclas o las ranuras del ratón.

Finalmente, se recomienda pasar un trapo seco para eliminar la humedad que haya podido quedar en la superficie y esperar a que esté completamente seco para volverlo a conectar.

Qué podemos hacer cuando cae líquido en el teclado

En caso de que se nos derrame un vaso de agua sobre el teclado, las opciones de 'supervivencia' son mayores si se trata de un ordenador de sobremesa; en un portátil, la cosa pinta peor. No obstante, debes apagar el ordenador inmediatamente y desconectar el teclado. Si hay algún cortocircuito, evitaremos que el resto del equipo pueda notarlo o se dañe.

Una vez hecho esto, damos la vuelta al teclado y dejamos que escurra toda el agua que pueda haber. Así, se evita que el líquido se cuele por más rejillas o alcance algún circuito eléctrico. Con un paño, secaremos todo bien y con cuidado. Es mejor si la bayeta es de microfibras puesto que no deja pelusas, pero podemos echar mano de una toalla, otro paño distinto o incluso una camiseta vieja. También es un gran absorbente el papel de periódico.

A continuación, deja que el teclado o el portátil se seque durante un par de días o tres, si puedes permitírtelo. En caso contrario, como mínimo deberás esperar 24 horas, según indica la web de 'PcComponentes'. Mientras está secando, puedes colocar debajo un paño de microfibra o enrollarlo en periódico para que absorba cualquier humedad. Si es un portátil, ciérralo pero introduce unas hojas de periódico o dicho paño entre la pantalla y el teclado.

Una vez pasado el tiempo prudencial de secado, llega el momento del encendido. Por cierto, antes de ello, si lo que cayó fue líquido de algún refresco o zumo, hay que eliminar cualquier resto pegajoso o algo que pueda hacer que funcione mal.