La modelo de 23 años ha hecho lo mismo que las más famosas, pero con una talla 42, en un mundo donde nadie pasa de la 38. Renn no es una cara nueva.
Durante diez años ha desfilado con los mejores y sin embargo, ha sido en los últimos tiempos cuando se ha revelado como el rostro de un movimiento o una revolución dentro de la moda al imponer su presencia y conseguir que la incluyan en los catálogos con todas sus curvas.
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Sin embargo, la chica no siempre fue así. Cuando tenía 14 años en Missisipi, por unos cazatalentos de Nueva York que le prometieron convertirla en la próxima Gisele Bundchen si adelgazaba sus caderas unos cuantos centímetros. Crystal Renn cuando comenzó su carrera de modelo a los 14 años y en la actualidad)
Renn decidió hacerlo y obligó su cuerpo a reducirse cinco tallas. "Yo pensé voy a comer sano y voy a ser una talla cero como las modelos", recuerda haberse dicho,según publica 'The Independent'.
La chica con talento y ambición perdió 15 kilogramos en tres meses, que la hicieron darse cuenta de que no sería tan fácil. La cosas llegaron al extremo y comenzó a subir y a bajar de peso hasta que se convirtió en una obsesión que invadió su vida.
Su supervivencia en el mundo de la moda y su batalla con el peso forman parte de la vida de Renn, que ha escrito un libro de memorias. 'Hungry' (Hambre, en español), la historia de una joven modelo de apetito y ambición.
Es una mujer conversadora, divertida, inteligente y conmovedora que asegura que "La gente necesita oír esta historia, porque es su historia". La mayoría de las mujeres estan relacionadas con esta historia de alguna manera."
Con su abundante cabellera, la piel perfecta y las curvas carnosas, en sus presentaciones Crystal Renn recuerda una estatua clásica o un Rubens, tal vez incluso Jennifer Lopez.
Ciertamente no es el tipo de modelos que vemos todos los días en los catálogos, sin embargo, Renn ha conseguido defender sus curvas, después de pasar por el infierno de la anorexia.
En su libro habla de ese periodo sin amarguras y sin rencor hacia el mundo de la moda. "No culpo a la industria de la moda para mi trastorno de la alimentación, fue mi decisión.
La industria de la moda en realidad me ofreció algunos de los mayores oportunidades de toda mi vida ", asegura. Sin embargo, cree que debería existir una variedad de mujeres en las pasarelas, en las revistas y no solo las de tallas cero.
Este mes Renn ha posado este mes para el famoso fotógrafo Terry Richardson, aparecerá en un reportaje para la revista de alta moda ' V', anunciada como 'Una cuestión de tamaño'.
Sin embargo, no parece haber un cambio de marcha, tal vez su editor solo pensó en "empezar a dar a mis clientes lo que quieren, tienen que ver la ropa en sus cuerpos."
En su libro Renn habla de la moda "como un signo de la masificación", porque "la delgadez extrema puede ser una forma de distanciarse de sí mismo.
Ella ya descubrió que las marcas se basan en la perpetuación de una aspiración, a menudo inalcanzable, sensación de lujo que tal vez la delgadez refuerza.
Para esta modelo espectacularmente bella, fuera de las tallas reconocidas en las pasarelas, está claro la pregunta "¿Y usted, consumidora gorda, nunca será hermosa, no importa lo que hagas. Y no será también capaz de usar mi vestido." Se encoge de hombros.
Entonces, acepta que todavía hasta que las grandes marcas no lo entiendan el tema será un asunto marginal.
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