Pereza cierra un año "mágico" con una descarga de su rock canalla en Madrid

Y es que "Aviones", el disco que da nombre a la gira y que lanzaron a finales de 2009, es de ese tipo de álbumes íntimos, diseñados para espacios pequeños que, sin embargo, y gracias a su fuerza, acaban por despegar y volar alto, hasta colmar un Palacio de Deportes de la Comunidad de Madrid.

Así, sobre un escenario sobrio, teñido de rojo, de grandes telones y alfombras, y con cuatro lámparas de pie y una gran lámpara cilíndrica central, el dúo Pereza apareció fundido en un gran abrazo. Rubén de pantalón, camiseta negra y chaqueta de un rojo intenso; Leiva de riguroso negro, incluido sombrero.

El dúo arrancó de forma explosiva y, como ha sido habitual en la gira, atacó los temas "Leones", "Animales" y "Manager". Para cuando le llegó el turno a "Quiero hacerlo" y "Como lo tienes tú" -ambos del tercer disco, "Animales" (2005)- ya Leiva (bajo, voz y guitarra) lucía camiseta sin mangas.

"Yo nací para estar con Leiva, con la banda y con vosotros, aquí, en el Palacio de Deportes", fueron las primeras palabras con las que Rubén (Guitarra y voz) se presentó ante el respetable, justo antes de encarar una fase de ritmo más pausado, con canciones como "Estrella polar", "Voy a comerte" y "Windsor".

Con "4 y 26" y "Amelie" -ambas de su último álbum, "Aviones"-, la banda cerraría la etapa más acústica del concierto, con un público ya entregado, que agitaba móviles y mecheros desde el centro del escenario.

"Súper hermanas" cambió el ritmo del recital hacia las melodías de corte "stoniano". De hecho, la canción fue dedicada al guitarrista de los Rolling Stones, Keith Richards, hoy de cumpleaños. "Es el mejor regalo de cumpleaños que podemos hacerle", anunció Leiva.

También tuvo protagonismo Tuli, batería en el primer disco, y número tres de la banda, quien desgarró el saxo durante "Súper hermanas", momentos antes de que el grupo se atreviera con el tema de los Beatles, "A little help from my friends".

"Es totalmente compatible tener a los Beatles por la mañana y a los Stones por la tarde", apuntó Leiva, intentando zanjar el debate que obliga a los músicos a posicionarse entre unos u otros. Con esa frase la banda se abalanzó sobre la canción "Beatles".

"Llévame al baile", tema del último disco, fue precedida de una emotiva dedicatoria al artista recientemente fallecido, Enrique Morente. "No quiero que pase ni un segundo más, sin que le dediquemos este concierto al maestro", fueron las palabras de Leiva.

"Violento amor" y "Pienso en aquella tarde" pusieron el punto de inflexión en la comunión entre el dúo y el respetable, que acabó por rendirse al rock eléctrico de los temas "Madrid", "Lady Madrid" y "Margot".

Pero el auténtico frenesí arribó con el sencillo "Todo" del disco "Animales", uno de los temas que catapultaron a la banda al estrellato del rock "cool" español. Tras este vinieron "Que parezca un accidente" y "Grupis".

"Ha sido un año mágico para nosotros. Nunca creímos que un disco como éste acabara con el Palacio de los Deportes lleno", espetó Leiva, y añadió: "Hay que creer en los sueños".

Ya sin camisetas, Rubén y Leiva pusieron punto final al recital con los temas "Champagne", "Señor Kioskero" y un discotequero "Superjunkies". Ahora ya solo les queda cerrar el año "mágico" el próximo jueves en el Palau Sant Jordi de Barcelona.