Nos trasladamos al año 2012. Durante un concierto de Michael Jackson, una fan se sube al escenario en plena interpretación de ‘You are not alone’ para abrazar efusivamente al cantante mientras este intenta retomar la canción al tiempo que corresponde al gesto de la espontánea.
Permanecen unos largos segundos abrazados, regalando una emotiva escena al público. Tras el abrazo, la joven se arrodilla ante el ‘Rey del Pop’ y se aferra a su pierna besándole la mano.
La seguidora no se separó del cantante hasta que apareció un miembro de seguridad y le apartó de Jackson, no sin antes oponer resistencia con patadas al aire incluidas. La misma escena se repitió durante otro ‘show’ en Túnez, donde otra fan corrió junto al artista, aunque en aquella ocasión quizá ya no fuera algo “espontáneo”.
Lo mismo ocurrió durante la gira ‘History Tour’ en Manila, solo que aquella vez quien sorprendió fue el propio bailarín al arrodillarse ante la atrevida fan.
Ya en la gira ‘Dangerous Tour’, en Frankfurt, Michael bailaba al ritmo de ‘Smooth Criminal’ cuando un fan saltó al escenario y a punto estuvo de abalanzarse sobre su ídolo. El placaje del personal de seguridad impidió que el suceso llegara a mayores.
Misma gira, pero diferente escenario. Jackson interpretaba ‘She’s out of my life’ en Bucarest cuando una mujer, elegida entre el público, pudo subir al escenario con la estrella del pop. Pero, a pesar de haber recibido la ‘invitación’ de los guardaespaldas, cuando vio interrumpido su momento con el cantante tampoco se lo puso fácil a los de seguridad.
Por el contrario, Allie Brook, de Fifth Harmony, no pudo agradecer la intromisión de un fan al escenario. En pleno concierto en 2016, mientras bailaba junto a sus compañeras de banda, la cantante fue sorprendida por un chico que la abrazó tan fuerte que hasta hizo que la joven Brook cayera al suelo.
Un episodio similar vivió la rapera Nicki Minaj durante otra actuación. En su caso, el fan fue rápidamente placado por los escoltas, que no dudaron en inmovilizarlo en pleno escenario e incluso algunos del equipo de la artista le propinaron patadas.
Pero fue Justin Bieber quien más sufrió las consecuencias del fenómeno fan. Su ‘show’ incluía una interpretación suya tocando el piano en pleno directo, momento que se vio violentamente interrumpido por un fan. El cantante sufrió tal sorpresa que tuvo que levantarse rápidamente y alejarse. Un escolta agarró sin miramientos al intruso y, en pleno forcejeo, el brillante piano de cola acabó volcado.
Lo que pasa cuando son los artistas quienes se acercan a su público
El grupo Foo Fighters dejó que un fan participara en la actuación de ‘Under pressure’ mostrando sus dotes a la batería y dejando a todos –miembros de la banda incluidos- boquiabiertos. Otros como Green Day, Paramore o Steel Panthern también quisieron agradar a algún asistente del público de la misma manera.
A la exchica Disney, Demi Lovato, su buena intención le jugó una mala pasada. La cantante pidió a seguridad que aflojara la barrera de protección que la separaba de su público y, segundos después, Lovato se vio rodeada por varios seguidores que saltaron a los guardias y quisieron acercarse a ella. La actriz tuvo que abandonar momentáneamente el escenario.
La gran Beyoncé también aprendió la lección con un susto. La artista del ‘funk’ quiso acercarse de más al borde del escenario para sentir el cariño del público y, además de eso, se llevó también su excesivo furor hacia la cantante. Uno de los fans aprovechó la cercanía de su ídolo la agarró con tanta fuerza que, por un momento, logró que la estrella tuviera una auténtico ‘baño de masas’. Gracias a la intervención de seguridad, pudieron sacar a Beyoncé de manos del público.
Otra situación sonada fue hace un par de meses cuando Beyoncé y su marido Jay-Z cerraban una aplaudida actuación desapareciendo del escenario por una pasarela. En plena salida de los protagonistas y con la guardia baja por parte de los escoltas, un espontáneo aprovechó para saltar al escenario y salir corriendo tras los cantantes por el mismo pasillo por el que habían estado. Los bailarines quedaron tan asombrados por la osadía que tardaron varios segundos en ir tras él.