"No sé qué quiero hacer con mi vida": consejos para descubrir tu vocación

  • ¿Cómo tomar la decisión adecuada sobre tu futuro?

  • ¿Qué pasa si me equivoco con la carrera que elijo?

  • Si te sientes perdido, estos 5 consejos te ayudarán a descubrir cuál es tu pasión en la vida

Desde que pasamos al instituto, empezamos a tomar determinadas decisiones que van a condicionar nuestro futuro laboral. ¿Estudiar francés o alemán? ¿Bachillerato de ciencias, de humanidades o de artes? ¿Grado medio o superior?

No es fácil responder a estas preguntas, sobre todo cuando no hemos cumplido la mayoría de edad. Sin embargo, es necesario decidir y a veces nos equivocamos, tal y cómo le pasó a Judit. Cursó el bachillerato de ciencias para no cerrarse opciones, pero al terminar empezó a estudiar Periodismo. Al ver que no era su vocación, comenzó la carrera de Filología, pero tampoco le llenó.

En Yasss vamos a conocer su testimonio y a recopilar varios consejos para cualquiera en su situación para que no te sientas tan solo si alguna vez has pasado por lo mismo.

El caso de Judit (21 años):

Nunca tuve muy claro a qué me quería dedicar. Mi padre es abogado y mi madre es enfermera, y siempre me han metido la idea en la cabeza de estudiar en la universidad fuese lo que fuese.

Me metí en el bachillerato de ciencias porque me dijeron que así no me cerraba ninguna puerta, aunque en el fondo hubiera preferido estudiar el de humanidades. Luego en selectividad saqué buena nota y pude elegir un poco lo que yo quisiera, pero no tenía claro lo que me llamaba.

Empecé a estudiar Periodismo y fue una decepción brutal. No me gustaban las clases, me sentía insegura, estaba triste y acabé con ansiedad. Lo dejé al segundo año tras reconocer que me había equivocado de carrera y empecé a estudiar Filología, que era mi segunda opción. Pensé que me llenaría, pero me siento muy vacía. Aunque voy aprobando los exámenes, no me gusta nada la carrera y tampoco me interesan las salidas laborales.

Mis amigos tienen claro lo que quieren y yo estoy en un limbo de confusión brutal

Ahora estoy pasando una mala racha porque todos mis amigos tienen claro lo que quieren y yo estoy en un limbo de confusión brutal. No quiero decepcionar a mis padres dejando otra vez la carrera, pero tampoco quiero estar año tras año pagando por algo que no me gusta.

Sé que mis problemas se solucionarían si descubriese mi verdadera pasión. ¿Cómo lo puedo hacer?”

Descubre tu vocación en 5 pasos

Algunas personas tienen la suerte de descubrir su vocación sobre la marcha cuando son adolescentes, pero en otros casos, es posible estancarse y sentirse perdido. No tiene nada de malo, así que no te sientas culpable si es lo que te sucede.

Una vez adquieres conciencia del problema, toca ponerse manos a la obra. Descubrir tu ambición en la vida no es un proceso fácil, pero a nivel psicológico es muy satisfactorio ya que permite conocerte mejor. ¿Cómo lograrlo?

  • Presta atención a lo que tú quieres y no a lo que te imponen los demás

Aunque nuestros padres y profesores siempre piensan en nuestro bien, la decisión final siempre depende de nosotros. No te metas en una carrera porque es lo que tus padres quieren para ti, ya que así sólo lograrás frustrarte y te sentirás más perdido en la vida.

Sopesa lo que te gusta y lo que no y no temas pedir consejo, pero recordando en todo momento que quien de verdad manda en tu vida eres tú.

  • Un año sabático no es sinónimo de hacer el vago

Los años sabáticos son muy comunes en otros países, sobre todo en Estados Unidos. Allí los jóvenes dedican un año a viajar, hacer voluntariado, trabajar de prácticas, aprender idiomas, conocerse mejor y madurar.

Aunque en España no es lo más habitual, puede ser una buena elección si te encuentras un poco desorientado.

  • Estudia a fondo las posibilidades

No empieces a estudiar una carrera por una corazonada. Investiga bien a fondo las asignaturas, las salidas laborales, la forma de impartir las clases en la universidad, las opiniones de otros estudiantes y los consejos de personas que se dediquen a ello profesionalmente.

De esta forma, tendrás una idea bien formada de lo que implica la carrera y será más difícil equivocarte.

  • Recuerda que la universidad no es el único camino

Desde que somos pequeños nos meten por los ojos la universidad como la mayor aspiración en nuestra vida, pero hay otros caminos igualmente válidos. Puedes hacer un módulo o un grado medio, y eso no te convierte en “inferior” o “peor” ni mucho menos.

Si lo que te apasiona es ser repostero, panadero, albañil o basurero, vete a por ello. Tu profesión no va a definir tu valor como persona, y los trabajos con menos cualificación son tan dignos como los que requieren un grado universitario.

  • Ponte en contacto con un profesional

Si has intentado encontrar tu meta en la vida y no lo has conseguido, puedes ponerte en contacto con un psicólogo especializado en orientación vocacional.

Mediante distintos test, conocerás qué es lo que más te gusta, cuáles son tus habilidades y cómo puedes encajar dichas habilidades con tus gustos y preferencias.

Tal y como acabamos de ver, encontrar tu vocación en la adolescencia es fantástico, pero si no es tu caso, no te sientas culpable ni te frustres. Tienes tiempo para descubrir tu camino.