La quiebra del banco de Silicon Valley frena la subida de tipos de interés

  • Los mercados ya descuentan un incremento de los tipos para luchar contra la inflación mucho más lento y moderado del esperado hace solo una semana

  • El Banco Central Europeo anunció en su última reunión que este jueves acometería una subida del 0,5%

  • Los expertos apuestan por que la FED no subirá tipos la semana que viene ante la situación de turbulencias del sector financiero

La quiebra de un banco de tamaño mediano de Silicon Valley puede descabalar los planes de los bancos centrales para frenar la inflación. Si hace apenas una semana el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, advertía de un posible acelerón en las subidas de los tipos de interés para contener el alza de los precios, hasta un nivel más alto del previsto, ahora buena parte de los analistas cree que la Fed ni siquiera moverá ficha en su próxima reunión del 21 y 22 de marzo.

Lo que ha pasado entre medias ha sido la quiebra de Silicon Valley Bank (SVB), un banco especializado en el sector tecnológico y en start-ups, que el pasado jueves sufrió la mayor retirada de depósitos en un solo día en la historia de Estados Unidos. Su hundimiento ha despertado el pánico en el sector financiero. "A la luz de la tensión en el sistema bancario, ya no esperamos que la Reserva Federal realice una subida de tipos en su próxima reunión", anticipaban este lunes analistas de Goldman Sachs, la entidad que previamente esperaba una subida de tipos de 25 puntos básicos.

“Después de que Jerome Powell pronunciara un discurso bastante agresivo, el mercado llegó a descontar que los tipos podrían subir en EEUU hasta el 5,75%. El movimiento que se ha producido tras la quiebra del SVB ha sido tan fuerte que el mercado ahora apuesta por que solo van a subir 25 puntos básicos, hasta el 4,75%, y a partir de ahí, hasta final de año van a bajar tres veces. Yo creo que es excesivo”, señala Natalia Aguirre, directora de Análisis de Renta 4 Banco. 

Reunión del BCE este jueves

Las turbulencias sobre el sector financiero provocadas por la caída de los bancos de Estados Unidos (además del SVB ha quebrado el Signature Bank, vinculado a las criptomonedas) podrían repercutir también en las decisiones de política monetaria del Banco Central Europeo, que este jueves se reúne con la previsión de acometer un alza de los tipos del 0,5%.

"La presidenta del BCE, Christine Lagarde telegrafió perfectamente esa decisión, pero el mercado ahora está con una previsión de que apruebe una subida de entre 25 y 50 puntos básicos, ya que esta inestabilidad también genera ciertas dudas. Será interesante porque, por un lado, las autoridades dicen que lo sucedido en Estados Unidos no es extrapolable al caso europeo, pero si no se suben esos 50 puntos previstos igual el mercado se pregunta por qué”, reflexiona Aguirre. Esta experta insiste en evitar análisis prematuros sobre las decisiones de los bancos centrales y advierte de que los elevados niveles de inflación complican en la posibilidad de pensar ya en el fin de las subidas de tipos.

Efectos de las rápidas subidas de los tipos

El hundimiento de SVB, que ha despertado los peores fantasmas de la crisis financiera de 2008, se produjo tras la retirada de 42.000 millones de dólares en depósitos en apenas 10 horas. Fue la respuesta de sus clientes ante las dudas que habían surgido sobre la situación financiera de la entidad, que hasta entonces era la número 16 de Estados Unidos por tamaño.

Y es que la subida de los tipos de interés (la Reserva Federal ha llevado a cabo ocho en un año para tratar de frenar una inflación en máximos en cuatro décadas) ha provocado la pérdida de valor de los fondos de renta fija a largo plazo.

“Lo que ha desvelado la crisis de SVB es que pasar rápidamente de tipos bajos a tipos moderados genera un riesgo bancario. Cuanto más suban los tipos, más riesgo hay, y no es tanto el hecho de subirlos como de hacerlo excesivamente rápido. Porque lo que sucede es que no se ha dado tiempo a que las carteras de deuda de las entidades se corrijan y se renueven”, señala Antonio Gallardo, responsable de Estudios de Asufin, la Asociación de Usuarios Financieros.

El experto señala que en esta situación de turbulencias financieras, la Fed podría optar por no acometer, de momento, más subidas de los tipos de interés para no generar más pánico en los mercados.  “Podría suceder eso o que el BCE los suba menos de lo esperado. En Europa hemos tenido que ir a la par de las subidas de Estados Unidos para que el euro no perdiera competitividad frente al dólar. Aunque todavía tenemos que luchar contra la inflación, si EE.UU. deja de subir tipos, tendríamos menos prisa para hacerlo por la parte del tipo de cambio”. 

¿Riesgo de contagio en el sector financiero?

A pesar de las acciones coordinadas de la Reserva Federal, el fondo de Garantía de depósitos y el Tesoro de Estados Unidos para cubrir todos los ahorros de los depositantes del SVB, y de la intervención del presidente Biden en defensa de la solvencia del sector bancario del país, la tranquilidad está lejos de volver a los mercados financieros. Prueba de ello es que este mismo lunes, el First Republic Bank, con sede en San Francisco, se hundía más de un 60% por los temores a un contagio, mientras que las bolsas de toda Europa cerraban en números rojos lastradas por los bancos.

“En este tipo de situaciones lo que tiene hacer un banco central es buscar cortafuegos, porque los mercados están intercomunicados. Aunque de momento estamos hablando de dos bancos de un tamaño mediano, pueden empezar a sonar los nombres de algunas entidades más grandes. Cuando surgen situaciones como estas, cualquier inversor busca reducir los riesgos al máximo. Eso lleva a que las debilidades de algunos bancos, que no florecen en una situación de normalidad, sí lo hagan en estos entornos de aversión al riesgo y se puedan generar los efectos contagios”, explica Salvador Jiménez, experto en análisis económico y mercados en Analistas Financieros Internaciones (AFI).

A pesar de las señales de temor que está ofreciendo el mercado, el experto considera no se está descontando una situación de pánico extremo, sino que los inversores están optando por buscar posiciones más defensivas. “El bono a diez años ha caído 20 puntos básicos, pero en una situación de riesgo extremo podría llegar a caer 80 o 100. El oro se está revalorizando un 3% y podría estar haciéndolo un 10%; el crudo, que cae un 2,8% caería un 10% o un 15%. Los movimientos bursátiles, que están siendo fuertes, se multiplicarían por tres. Lo que observamos es que el mercado muestra una preocupación creciente, pero cree que esta situación pueda controlarse y redirigirse”, opina Jiménez. 

Y mientras las autoridades de Estados Unidos se esfuerzan por devolver la calma a los mercados, la Unión Europea rechaza que exista “riesgo específico de contagio” para los bancos comunitarios. Aun así, el comisario de Economía, Paolo Gentiloni, aseguraba a su llegada al Eurogrupo, que se vigilaría la situación “en estrecho contacto con el Banco Central Europeo”.

“En Europa los riesgos de contagio son mucho más limitados. Estamos hablando de entidades mucho más diversificadas en términos de depósitos, y aquí no tenemos ningún banco cuya actividad de negocio esté concentrada en un solo sector, como el tecnológico. Además, el hecho de que los bancos estén mucho mejor capitalizados ahora que en 2008 también es un punto a favor. Las ratios de liquidez de los bancos europeos y españoles son elevadas”, valora la responsable de Renta 4 Banco.

Esa misma defensa de la banca española era la que realizaba la vicepresidenta primera Nadia Calviño, que alababa las actuaciones “con rapidez y contundencia” llevadas a cabo por las autoridades ante la quiebra del SVB y aseguraba no conocer “ninguna exposición concreta” de bancos españoles a los afectados en Estados Unidos.

Además, la responsable económica del Gobierno defendía la necesidad de que en un contexto de “volatilidad tan intensa” todos los agentes públicos y privados, desde bancos hasta los responsables de política fiscal y monetaria, actúen "con la máxima prudencia".