¿Cuáles son los riesgos de aceptar el borrador de la renta sin revisar?

Cómo modificar el borrador de la renta tras haberlo confirmado
Qué pasa si aceptamos el borrador de la renta sin revisar
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MadridCada año, millones de contribuyentes acceden al borrador de la declaración de la renta que la Agencia Tributaria pone a su disposición. Este documento, que recoge la información fiscal que Hacienda conoce de cada ciudadano, se presenta como una herramienta cómoda y eficiente para facilitar el cumplimiento de las obligaciones tributarias. Sin embargo, aceptar ese borrador sin realizar una revisión exhaustiva puede provocar que remitamos errores que tengan consecuencias graves, tanto a nivel económico como legal. Analizamos por qué conviene revisar siempre el borrador antes de confirmarlo y qué riesgos implica no hacerlo.

Un documento útil pero no infalible

El borrador de la declaración de la renta no es una propuesta cerrada ni definitiva. La propia Agencia Tributaria insiste en que se trata de un documento provisional que puede contener errores, omisiones o información incompleta. Y es que Hacienda solo dispone de los datos que otras entidades (bancos, empresas, aseguradoras, comunidades autónomas...) le han facilitado. Pero hay muchos aspectos de la vida personal y económica de un contribuyente que pueden no estar reflejados o figurar de forma incorrecta.

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Entre los fallos más habituales figuran datos personales desactualizados (estado civil, nacimiento de hijos, domicilio fiscal), deducciones no aplicadas (por alquiler, maternidad, discapacidad, inversión en vivienda habitual, etc.), ingresos omitidos (especialmente en el caso de autónomos, rentas del extranjero o alquileres no declarados) o errores en las cotizaciones. En definitiva, el borrador es un punto de partida, pero no garantiza que la declaración sea correcta ni completa.

Consecuencias económicas: perder dinero o sufrir sanciones

Aceptar sin revisar un borrador incorrecto puede tener un doble coste. Por un lado, si el contribuyente omite deducciones a las que tiene derecho, pagará más impuestos de los que realmente le corresponden o recibirá una devolución inferior a la esperada. Un estudio de TaxDown estima que un 35% de los contribuyentes no aplican todas las deducciones posibles por confiar ciegamente en el borrador.

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Por otro lado, si la declaración contiene errores u omisiones que supongan una menor tributación de la debida, el contribuyente puede enfrentarse a una inspección y una sanción por parte de la Agencia Tributaria. Las multas por errores involuntarios pueden llegar al 50% del importe no ingresado, y si Hacienda detecta dolo o reiteración, pueden alcanzar el 150%.

Como subraya la asesora fiscal Patricia Galván, "el borrador es una ayuda, pero la responsabilidad última de que la declaración sea correcta recae siempre en el contribuyente".

Cómo revisar correctamente el borrador

La mejor forma de evitar errores es revisar cuidadosamente todos los apartados del borrador antes de confirmarlo:

  • Verificar que los datos personales (nombre, estado civil, número de hijos, domicilio) estén actualizados.
  • Comprobar que todos los ingresos estén incluidos: salarios, pensiones, rendimientos del ahorro, alquileres, etc.
  • Revisar que se han aplicado correctamente todas las deducciones estatales y autonómicas disponibles.
  • Declarar correctamente las inversiones, ventas patrimoniales, criptomonedas o ayudas públicas.
  • Simular distintos escenarios (declaración individual o conjunta, aportaciones a planes de pensiones, etc.) utilizando el simulador oficial Renta WEB Open de la Agencia Tributaria.

Aceptar el borrador de la renta sin revisar equivale a firmar un contrato sin leer la letra pequeña. Puede parecer cómodo y rápido, pero conlleva riesgos importantes. Revisarlo cuidadosamente —por cuenta propia o con ayuda de un asesor fiscal— es la mejor forma de protegerse, optimizar la declaración y evitar sobresaltos con Hacienda. En cuestiones fiscales, la prudencia no solo es recomendable: es esencial.