Maninat participó junto con otros funcionarios internacionales en el foro "Crecimiento Económico y Trabajo Decente en América Latina, como instrumento para enfrentar la crisis mundial", que organizó en la capital panameña el Ministerio de Trabajo de este país.
El director de la OIT dijo que 2008 fue un año bueno para América Latina, donde se incrementó el salario mínimo y bajó la tasa de paro en un 7 por ciento, pero destacó carencias en lo que respecta a las dificultades de las mujeres de acceder a un empleo y al crecimiento del trabajo informal.
"Las mujeres siguen encontrando resistencia para entrar con plenitud a los mercados laborales, mientras que la economía informal creció de tal forma que de cada diez empleos, seis pertenecen a ese sector", declaró Maninat a Efe.
Asimismo, anotó que la tasa de desempleo de los jóvenes es dos veces mayor que la de los adultos, lo que impide a la región cumplir plenamente con el concepto de trabajo decente.
Esta noción fue propuesta por la OIT en 1999 para establecer las características que debe reunir una relación laboral para considerar que cumple los estándares laborales internacionales y se realiza en condiciones de libertad, igualdad, seguridad y dignidad humana.
No obstante, precisó que entre los Gobiernos de la región hay conciencia en que el trabajo decente es un instrumento para salir de la pobreza "y esto se ha puesto de manifiesto en las cumbres presidenciales donde se ha señalado que ésta es la fundamental aspiración de la población".
Por otro lado, Maninat alabó las decisiones por parte de algunos países latinoamericanos, ante la crisis internacional, de invertir más recursos para reanimar sus economías, de fortalecer las pequeñas y medianas industrias que son las que más generan puestos de trabajo en la región y de establecer empleos temporales que le permitan a la población "capear el temporal" por cierto tiempo.
Otra estrategia ha sido la protección social, para que los sectores más desfavorecidos no vayan a ser los mas afectados.
Finalmente, el delegado de la OIT señaló que el trabajo infantil ha descendido en América Latina, gracias al trabajo que ha realizado la organización y porque la gente "ha comprendido que el papel de los niños en la sociedad es estudiar".
La OIT se ha marcado entre sus metas para América el eliminar las peores formas de trabajo infantil para el año 2015 y eliminar el trabajo infantil en su totalidad para 2020.