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El Plan Nacional de Respuesta a la Guerra, aprobado este martes por el Consejo de Ministros, prohíbe los despidos objetivos en las empresas que recurran a expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) para superar la crisis de la inflación. También abarca a aquellas que lo hagan por el incremento de los precios de la energía.
La encargada de comunicarlo ha sido la vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros. También han participado las otras dos vicepresidentas del Gobierno, Nadia Calviño y Teresa Ribera.
La primera de las prohibiciones, despedir si la empresa ha recurrido a un ERTE, ya se adoptó en la pandemia. Ahora se le añade que el despido estará injustificado por causas relacionadas con el encarecimiento de la energía.
Las empresas tampoco podrán despedir alegando falta de suministros o subida de precios en la energía. "Si existe escasez de suministros o el impacto energético es fuerte", ha indicado Díaz, hay mecanismos como los ERTE regulados en la reforma laboral.
Díaz ha señalado que las empresas que incumplan estas prohibiciones tendrán que devolver las ayudas públicas recibidas. En esta línea, ha advertido a los empresarios de que "no hay que despedir" trabajadores, ya que existen mecanismos como los ERTE.
"Tenemos todos los mecanismos de protección social, los ERTE ordinarios y el mecanismo RED para que esto no ocurra. No tiene sentido recurrir a un ERTE si luego la vocación de los empleadores es despedir. No tiene sentido destinar y darles recursos públicos si luego se les permite despedir", ha enfatizado.
Díaz ha recibido el respaldo de la vicepresidenta primera y ministra de Economía, Nadia Calviño. Ha asegurado que es "de sentido común" que las empresas receptoras de recursos públicos no puedan usarlos para realizar despidos. Previamente, Díaz había asegurado que Calviño y ella "dicen lo mismo". Así ha zanjado la cuestión de si habían tenido diferencias sobre el tema.
Díaz ha recordado a los empresarios, que han criticado la prohibición de despedir, que la medida estaba negociada y acordada con sindicados y ellos cuando se establecieron los ERTE en la pandemia. Estos prohibían los despidos objetivos para empresas en ERTE y las obligaba a mantener el empleo durante seis meses.
El presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, ha instado a Díaz a fundar una empresa para saber lo que es. Ante estas palabras, la vicepresidenta segunda ha asegurado que el dirigente de la patronal que "ya pactó en nombre de la CEOE" el veto a los despidos durante la pandemia.
"Seguro que tiene la suficiente empatía social para entender y explicar a la ciudadanía que no se puede recibir dinero público a modo de cotizaciones a la Seguridad Social pagadas por los españoles y a la vez despedir. Como este mecanismo ha sido muy exitoso en la gestión de la pandemia, estoy segura de lo que lo conoce perfectamente. Él mismo negoció esta cláusula, igual que la cláusula del mantenimiento del empleo en la anterior crisis", ha aseverado.
Para Díaz, el Plan de Respuesta a la Guerra es una de las normas "con mayor ambición" desplegadas hasta ahora en España. "De esta crisis vamos a salir juntas", ha destacado. Al mismo tiempo ha lanzado un mensaje de "tranquilidad" a la ciudadanía, pese al "miedo y las turbulencias" que genera la situación actual.