Invertir en Inteligencia Artificial: el futuro es ahora

Tressis 30/05/2018 12:15

Los robots ya son capaces de hablar como nosotros, llevar una conversación fluida, incluso de hacer pausas para dudar. Pueden pedir hora en la peluquería por nosotros, reservar mesa para seis en un restaurante, incluso responder a las preguntas de su interlocutor con una naturalidad sorprendente, sin que éste se dé cuenta de que no está hablando con una persona real.

En Tressis y una garantía de inversión que no ha hecho más que despegar para quedarse y formar parte de nuestras vidas.

Según cálculos de Accenture y Frontier Economics, el mercado de la Inteligencia Artificial puede pasar de generar unos 600 millones de dólares en 2016 a más de 37.000 millones en 2025. Compañías como Tesla, Amazon, Broadcom, Facebook, o Salesforce, solo por citar algunas, son líderes dentro de este segmento.

La Inteligencia Artificial está impulsando una nueva revolución industrial. La transformación está presente en todo tipo de actividades y sectores, y sus aplicaciones se sienten ya en ámbitos como la sanidad, el transporte, la seguridad o el entretenimiento.

El denominado Big Data permite analizar grandes cantidades de datos y descubrir patrones, comportamientos o tendencias antes ocultos. Mejora la capacidad predictiva y permite a las empresas personalizar sus servicios y ser más eficientes, impulsando la investigación y mejorando la toma de decisiones. Una farmacéutica, por ejemplo, puede ver en qué ciudades están aumentando las búsquedas de información en Google relacionadas con la palabra “gripe”, y así enviar sus medicamentos a tiempo a las zonas en las que se van a necesitar.

El Big data ya ha creado más de 6 millones de empleos, y está transformando nuestra percepción de los problemas y la forma en que los solucionamos. El volumen total de datos que se generan en el mundo se duplica cada 15 meses y su tamaño es tal que más del 90% del total de datos creados por la humanidad se ha generado en los últimos dos años

En sanidad, por ejemplo, sólo la venta de robots para intervenciones quirúrgicas puede alcanzar los 6.400 millones de dólares en el año 2020. El uso de estos robots ha aumentado la productividad, reducido los costes y fomentado la colaboración, pudiendo llegar a suponer una mejora del rendimiento del 30%.

Cuando esta aplicación se asiente en el entorno sanitario, se prevé que la medicina preventiva se dispare ya que, con los expedientes médicos disponibles en la nube, los diagnósticos serán más rápidos, precisos y baratos, ahorrando 300.000 millones de dólares anuales. Además, la asistencia sanitaria será más personalizada, y las empresas, investigadores y organizaciones sanitarias podrán trabajar juntos para subsanar las deficiencias tecnológicas.

Fuente: Allianz Global Investors

En cinco años más, se calcula que el mercado de vehículos sin conductor alcanzará los 39.000 millones de dólares en ventas anuales y los nuevos modelos de negocio podrían incrementar los ingresos alrededor de un 30%. La salida del primer vehículo comercial de este tipo está prevista para 2020, y la implantación de estos coches puede lograr una reducción de 300 millones de toneladas de CO2 al año.

La inteligencia artificial también formará parte de las características del coche sin conductor. La gran mayoría de los directivos prevén que los vehículos con baterías eléctricas dominarán el mercado en 2025. Los vehículos contarán con frenos autónomos, que reducirán el riesgo de convulsiones de vehículos en un 14%. Sus sensores ayudan a detectar los bordes y las marcas de carril. Los semáforos y las señales inteligentes comunicarán la normativa de tráfico y la dirección a los vehículos, y las cámaras de vídeo detectarán las señales viales, vigilando a otros vehículos mientras están atentas a los peatones y a los obstáculos.

La relación entre ocupantes y coche empieza ya a ser una realidad gracias al internet de las cosas, que proporciona la vía para comunicarse con el vehículo cuando está en movimiento, para atender las necesidades de los pasajeros y ayudarle a encontrar aparcamiento.

Todos estos cambios se convierten también en una oportunidad de inversión. "El avance de la Inteligencia Artificial supone ya una gran disrupción para muchos modelos de negocio. Como inversores, nuestra misión es analizar el potencial de dicha disrupción, identificando aquellas compañías que se benefician, desarrollan y crecen de manera sostenible gracias a la Inteligencia Artificial", afirma Sebastian Thomas, gestor del Allianz Global Artificial Intelligence, el primer fondo en Europa dedicado a este segmento del mercado.

La Inteligencia Artificial constituye uno de los temas de inversión más estimulantes de la actualidad y está cambiando ya nuestro mundo. Y esto no es más que el principio.