{{#section.link.href}}
{{section.link.title}}
{{/section.link.href}}
Enero va a terminar con frío extremo en casi toda España. Las bajas temperaturas que nos han acompañado durante la segunda quincena del mes van a tocar fondo esta semana en más de treinta provincias, que se encuentran en aviso por el riesgo para la población y las heladas. La mañana del lunes podría ser la más gélida del invierno, con hasta 15 grados bajo cero esta madrugada.
Tenemos por delante una semana de sol en la mayor parte de España, pero ni por esas nos libraremos del frío. La llegada del anticiclón va a desplazar el aire húmedo que ha causado fuertes nevadas incluso a localidades a orillas del Mediterráneo, en Alicante o Barcelona, así como las islas Baleares. Pero, paradójicamente, los cielos despejados van a favorecer el desplome de las temperaturas y las heladas nocturnas.
Más de 30 provincias de una decena de comunidades autónomas estarán este lunes en riesgo (amarillo) por temperaturas mínimas de hasta -9ºC, según el pronóstico de la Agencia Estatal de Meteorología.
Las heladas serán generalizadas en el interior peninsular, más intensas en zonas altas y que pueden ser fuertes en Pirineos y, localmente, en puntos de otros sistemas montañosos del norte de la Península.
El frío nocturno va a persistir toda la semana con heladas generalizadas, con temperaturas que serán inferiores a los cero grados en prácticamente toda España.
Por el día, en cambio, parece “más probable ya que haya un ambiente más templado, siguiendo la estela de parte de Europa donde las temperaturas serán más altas de lo normal”, ha informado el portavoz de la Aemet, Rubén del Campo.
La influencia del anticiclón hará que predominen el sol y las temperaturas templadas por el día, superando ya los 10 ºC en el norte peninsular desde el miércoles -en Lugo o Santander hará unos 12 ºC-, y se rondarán los 15 ºC en el interior, como en Madrid o Teruel. En el sur y a orillas del Mediterráneo se alcanzarán los 17 en Huelva o los 18 ºC en Valencia.
Por la noche, los cielos despejados y la ausencia de precipitación y de viento hará que el suelo se enfríe muy rápidamente, por lo que la amplitud térmica será muy pronunciada, con una diferencia de más de 20 grados entre la máxima y la mínima.
Para la segunda semana de febrero, no hay una tendencia clara en cuanto a las precipitaciones, según la Aemet, pero lo más seguro es que se mantengan las temperaturas templadas “en buena parte de la mitad este peninsular y en los archipiélagos, mientras que en la mitad oeste las temperaturas se quedarán más cerca del valor promedio normal”, señala Del Campo.
Para la segunda quincena de febrero los modelos meteorológicos prevén que continúe “el ambiente más templado de lo normal para la época en el este de la Península y los archipiélagos”.