Nuestra meteoróloga, Rosalía Fernández, anticipa que "este mes continuará el patrón de entrada de borrascas por el Atlántico entre paréntesis de buen tiempo y altas temperaturas".
Aunque meteorológicamente no podemos avanzar con certeza al 100% el tiempo hasta finales del mes de mayo, los modelos con los que trabajan nuestras meteorólogas sí apuntan a una continuación de la pauta de abril.
La NOAA, el máximo organismo meteorológico de EEUU (no solo a nivel nacional sino en todo el mundo), es clara en este punto, apunta Fernández. Nuestra meteoróloga recoge sus previsiones e insiste en que mayo será "lluvioso en toda la Península con la única excepción del noroeste". Siguiendo las previsiones de la NOAA, Fernández nos cuenta que "Galicia volvería a ser la comunidad autónoma donde disfrutemos del mejor tiempo, el más propio a lo que cabe esperar en un mes de mayo".
Rosalía Fernández argumenta que si seguimos la previsión de la NOAA, que ya clavó la previsión de abril con el índice NAO en negativo y la irrupción de borrascas, "la mitad occidental y Levante volverían a marcar registros históricos para un mes de mayo". La formación de nuevas DANAS o la entrada nuevamente de depresiones por el oeste estaría por definir, per "sería la explicación más lógica al apunte que vienen haciéndonos la NOAA para el mes de mayo".
En cuanto a las temperaturas, nuestra meteoróloga avanza que, según la NOAA, "serán normales para la época, aunque existe una ligera tendencia al enfriamiento en el sureste". Probablemente, la presencia continuada de las lluvias, como ha ocurrido en abril, propicie que la media de mayo se queda más corta en puntos del sur donde a finales de mayo podemos alcanzar ya la marca de los 30 grados.
*Imagen: Anomalías de precipitación y temperatura para las próximas semanas respecto a valores semanales normales / Aemet
La AEMET que nos facilita sus previsiones y avances semanales a través del modelo europeo coincide con la NOAA, "quizás de forma menos generalizada pero también señala que las lluvias se quedan con nosotros", recuerda Fernández quien también subraya que aun así "mayo es un mes en el que las temperaturas irán ascendiendo gracias al mayor número de horas de luz solar".
Tras una última semana de abril con valores de máximas más propias de finales de febrero y con lluvias y nevadas generalizadas, estrenaríamos mayo "con un ascenso de temperaturas, pero con la vista puesta en nuevas situaciones de inestabilidad en el Mediterráneo" así como también estas precipitaciones darían la bienvenida al nuevo mes en el Cantábrico. Aquí parece que llegan para quedarse.
Alcanzaremos, siempre según el modelo europeo, "la mitad de mayo con un aumento de la inestabilidad en prácticamente toda la Península" y los cielos tapados son sinónimo de temperaturas máximas más cortas por la ausencia del calentamiento del sol durante el día. Además, explica Fernández, "no olvidemos que a mitad de mayo nos visitan siempre las tormentas, que son fieles a su cita y se producen, precisamente, por esos contrastes de temperatura entre una superficie en la que el sol ya calienta lo suficiente en contraste con el aire frío e inestable que nos visite".
Por tanto, a falta de que se vaya concretando la tendencia de las salidas del modelo europeo, todo parece indicar que este 2019 se hará bueno el refrán que nos advertía que "cuando marzo mayea, mayo marcea".
Fernández aconseja que el cambio de armario lo hagamos de forma paulatina a un mes de que entre el verano meteorológico, porque "tendremos cambios bruscos y echaremos mano aún de ropa de abrigo y paraguas".
Nuestra meteoróloga nos recomienda de cara a este mes de mayo que "debemos ser muy cautos porque estamos en una estación, la primavera, en la que todo puede cambiar de forma muy brusca, en espacios de tiempo realmente breves".
Por tanto, no debería sorprendernos que sigamos anunciando lluvias, chubascos tormentosos y nuevas nevadas en zonas de montaña donde no vieron la nieve en pleno invierno.
Ha llovido tanto que se han batido récords para abril en numerosos observatorios de la AEMET, por ejemplo, en la Comunidad Valenciana, Castilla La Mancha o Murcia. En otros, del centro y sur, hacía muchos años que no llovía tanto en un mes que si bien es de "aguas mil" no suele comportarse por igual en todas las regiones.
La capital de provincia donde más ha llovido y que ha batido récord de precipitación máxima en un mes de abril ha sido Alicante, con un total de 99 litros por metro cuadrado el pasado Viernes Santo. Se ha pulverizado el récord anterior de 'tan solo' 38 litros, en abril de 2004.
Junto a ella, destacamos Albacete donde se recogieron también el último Viernes Santo un total de 61 litros, muy por encima de los 42 litros del año 1983.
Por su parte, Teruel vivió también un Jueves Santo histórico. Nunca había llovido tanto en un solo día de un mes de abril. En total, cayeron 54 litros, cerca de los 51 de 2007.