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El viento de despeinarse y las nevadas en nuestras cimas han llegado sin preaviso y con intenciones de perturbar el no-invierno que arrastrábamos. El temporal de la primera semana de marzo ha sido un respiro en muchos sentidos: para los embalses, para aliviar la contaminación en nuestras ciudades, para animar la temporada de esquí en las estaciones que todavía no han cerrado… No obstante, lo 'bueno' dura poco y vamos a volver, pasada la tempestad, a la calma. Prepara la visera.
Marzo es un mes de tiovivos, o lo que es lo mismo, de idas y venidas del calor, las lluvias, etc. Por lo tanto era de esperar que pudiera traernos sorpresas después de un febrero que ha sido el más cálido y seco de la serie histórica, como acaba de confirmar el portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).
Pero no cantemos victoria. Queda mucho mes. El año pasado, sin ir más lejos, febrero se comportó de manera similar, aunque con menos excesos que este año, para dar paso a un marzo que empezó con lluvias en casi toda España para después perder el ritmo y colocarse en el segundo puesto del pódium de marzos secos. Cruzamos los dedos para que no se repita.
Desde luego por ahora las predicciones son poco alentadoras. Hemos tenido cinco borrascas que se agradecen en lo que va de mes, pero todo apunta a un restablecimiento de la estabilidad a partir del sábado con la llegada del anticiclón de las Azores.
Las altas presiones, además de arrastrar aire cálido en altura, favorecerán la entrada de viento de poniente así como de viento del norte que irá comprimiéndose a medida que avanza, calentándose así a su paso. Resultado: el ascenso que empieza el sábado con nada más y nada menos que un subidón de hasta 8ºC tendrá continuidad como mínimo hasta el martes.
Para entonces, el termómetro regalará temperaturas más propias de junio a zonas de la vertiente del Mediterráneo como Valencia y Murcia, y del valle del Ebro, como son Zaragoza y el norte de Teruel. En el resto de España también se notará el sofoco repentino: va a hacer más de 20ºC en prácticamente todo el país, como ilustran los mapas del meteorólogo César Rodríguez Ballesteros.
En Extremadura, Castilla-La Mancha, Andalucía, sur de Cataluña y puntos de Navarra, así como Aragón, podrán superarse incluso los 24ºC. Únicamente se notará algo más de fresco correspondiente a la época del año en Galicia y León, que registrarán en varias localidades menos de 15ºC.
La noche también se caldeará. Solo bajarán de los 5ºC de madrugada zonas de montaña y alrededores. Será complicado, por tanto, que pueda aguantar la nieve y el hielo que han reaparecido estos días en nuestras sierras. Como resultado, tocará ir con cuidado por el riesgo de aludes que pueda darse en los próximos días. Lo mejor para no exponerse es estar atento a las recomendaciones de Protección Civil y la Aemet.
Las temperaturas podrán bajar de nuevo, ha comunicado la Aemet, la segunda mitad de la semana. Aunque no cabe esperar grandes cambios, ya que los cálculos apuntan a una semana en conjunto más cálida de lo normal (con respecto al promedio del periodo de referencia 1981-2010). En buena parte del sur y sudeste peninsular la anomalía podrá ser superior a los 3ºC.