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Itahiza Domínguez, sismólogo del Instituto Geográfico Nacional, IGN, ha destacado este domingo el décimo aniversario de la erupción de El Hierro, un acontecimiento que permitió mejorar la técnica de vigilancia volcánica para otras situaciones como la que se vive hoy en día en La Palma.
Según el experto, había "muchas cosas preparadas para conmemorar" la erupción de El Hierro aunque, como es obvio, "la erupción de La Palma es ahora mismo la prioridad". La erupción del volcán Tagoro el 10 de octubre de 2011 marcó el "camino" para vulcanólogos y sismólogos.
La erupción de El Hierro, según explica Itahiza Domínguez, fue precedida de 80 días de actividad sísmica (10.000 terremotos), que migró desde el norte hasta el sur y una deformación que alcanzó los cinco centímetros.
Unas 30 horas antes de la erupción del volcán Tagoro se produjo un terremoto de magnitud 4.4, que fue seguido de una sismicidad superficial que, relocalizada, mostraba un ascenso desde los tres kilómetros hasta la superficie. A las 05 horas de la mañana del 10 de octubre de 2011 comenzaba a registrarse un tremor volcánico con el que daba comienzo la erupción de El Hierro.
Desde entonces se han realizado muchas mejoras para la vigilancia volcánica, destaca el especialista. Entre ellas, la relocalización relativa de terremotos que permite determinar con más precisión la sismicidad. Una técnica que se ha aplicado en La Palma.