MAREAS VIVAS

Susto en las Islas Cíes por las mareas vivas: dos personas fueron arrastradas por el mar en la pasarela de Rodas

Una ola arrastró a dos personas que cruzaban la pasarela de Rodas en las Islas Cíes. eduardovieira574
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VigoLas mareas vivas de esta semana dieron más de un susto a los visitantes de las Islas Cíes, algunos de ellos poco conocedores de la fuerza del mar en el archipiélago del Parque Nacional.

Debido al intenso oleaje, coincidiendo con la pleamar, la pasarela de Rodas, que une las islas de Monteagudo y Faro tuvo que ser cerrada al paso, durante la tarde del pasado martes. Pero mientras muchos de los visitantes respetaban el aviso, otros decidieron arriesgarse y cruzar y dos personas acabaron arrastradas por las olas que saltaban con gran fuerza, por el encima del espigón.

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En un vídeo grabado por uno de los testigos, se puede ver cómo mientras un grupo de visitantes espera que el mar se calme, dos personas deciden cruzar al otro lado, pero el mar los arrastra. Finalmente, los socorristas de la playa de Rodas fueron quienes acudieron a rescatarlos. El pasado martes estaba activada una alerta amarilla en la costa gallega por mar de fondo con una previsión de olas de hasta cuatro metros.

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La pasarela de Rodas une las dos islas y conecta con el muelle y el camping

En uno de los casos, una de las personas que cruzó, intentaba llegar al muelle de Rodas para coger el barco de vuelta, teniendo que atravesar la pasarela. Esta pasarela que une las dos islas es la única vía para poder volver por ejemplo a la playa de Rodas, o al muelle. La otra alternativa es cruzar por la arena de la playa de Rodas, en un recorrido mucho más largo y a veces incómodo. Cuando hay mar de fondo o sube la marea, el paso se corta, colocando una señal de aviso a ambos lados del espigón donde se alerta del peligro.

Muchos de los visitantes, que necesitan volver al muelle para coger el barco de vuelta, o al camping, suelen esperar en los extremos, al momento menos peligroso para cruzar, pero el mar no siempre lo pone fácil. Y no todos son conscientes del riesgo que supone la fuerza del oleaje en días de mareas vivas, como ha sucedido esta semana.