Ângela Ferreira anuncia que está embarazada de su marido fallecido en 2019 en Portugal: "Han sido años de lucha"

  • Ângela Ferreira ha anunciado que está embarazada de su marido Hugo, fallecido en 2019 por cáncer

  • Tras la muerte de su marido, inició una lucha para lograr que legalizasen la inseminación post-mortem en Portugal

  • Hugo dejó escrito su deseo de tener un hijo con su mujer con el semen que había criopreservado antes de morir

Ângela Ferreira, la mujer que inició una lucha para lograr que legalizasen la inseminación post-mortem en Portugal, ha anunciado que está embarazada de su marido Hugo, fallecido en 2019 por cáncer y quien dejó por escrito su deseo de que así fuese.

“¡Hoy finalmente comparto con todos ustedes la tan esperada noticia! Han sido años de lucha para llegar hasta aquí, el proceso fue largo y doloroso... ¡Pero finalmente lo logramos!”, ha celebrado la mujer, compartiendo un emotivo vídeo de recuerdos con Hugo con todos sus seguidores, “con mucha alegría y con el corazón lleno”, “que ahora dos corazones laten dentro de mí”.

La lucha de Ângela Ferreira por la legalización de la inseminación post-mortem en Portugal

Asimismo, en la publicación ha querido agradecer a todos aquellos que le han ayudado “a llegar hasta aquí, gracias por su apoyo, mensajes constantes y cariño. Sin ustedes no hubiera sido posible y por eso mi alegría poder compartir este momento con ustedes”.

Su marido Hugo falleció por cáncer en 2019 y dejó escrito que quería que su mujer tuviese un hijo cuando él muriese con el semen que había criopreservado, pero entonces esto no era legal en Portugal, así que Ângela Ferreira inició una lucha por cambiar la ley.

En este contexto, tras la muerte de Hugo la historia fue difundida en la serie documental ‘Amor sem fim’ en la cadena lusa TVI y Ângela Ferreira inició una petición que firmaron más de 100 000 personas, por lo que la cuestión fue discutida en el parlamento y varios partidos mostraron su apoyo.

Comenzaron entonces varios proyectos de ley y en abril de 2021, el presidente de Portugal, Marcelo Rebelo de Sousa, vetó que se permitiese a una mujer ser inseminada con el material genético de su pareja fallecida. Aun así, en noviembre de 2021 entró en vigor la ley que permitía la inseminación artificial, pero no otras técnicas de reproducción asistida.

Ângela Ferreira urgió entonces al Parlamento a que aclarase esta cuestión debido al bajo porcentaje de eficacia de la inseminación artificial respecto a otras técnicas de reproducción asistida, un 10 por ciento, frente al 60 de la fecundación in vitro, precisó.

En junio de 2022, comunicó el fin al estancamiento legal en esta cuestión en sus redes sociales. “¡Hoy sí, hoy hicimos historia! ¡Hoy cualquier mujer en mi situación que quiera puede continuar el sueño!”, escribió, meses antes de comunicar, finalmente, su embarazo