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Donald Trump ya está en Nueva York para declarar ante el juez, en el tribunal penal de la Gran Manzana, tras su acusación por un pago irregular a la actriz porno Stormy Daniels, durante su campaña electoral de 2016. Como si de una estrella de rock se tratara, el magnate aterrizó ayer con su avión privado en el aeropuerto de La Guardia para pasar la noche en un ático de lujo, ubicado en la torre que lleva su nombre.
Según su abogado Joe Tacopina, el exmandatario se declarará no culpable e irá a juicio pero antes será retratado de frente y de perfil, y le serán tomadas las huellas dactilares, al igual que a cualquier otra persona imputada. Con la particularidad de que Donald Trump, además, puede ser acusado de más de 30 cargos solo por el caso Daniels.
A las 14:15 de hoy martes, hora de Nueva York (20’15 h. en España), Donald Trump saldrá de su torre para ser conducido, sin esposar, hasta los juzgados. La caravana de coches oficiales cruzará una ciudad cuya población ha sido aleccionada para controlarse. Especialmente aquellas personas que quieran salir a manifestarse tanto a favor como en contra de la acusación del millonario.
“Contrólense”, dijo ayer Eric Adams, alcalde de la ciudad, durante una rueda de prensa en el ayuntamiento. "La ciudad de Nueva York es nuestro hogar, no un patio de recreo para manifestar la ira de manera fuera de lugar. Somos la ciudad grande más segura de Estados Unidos porque respetamos el estado de derecho”, señaló en un clima de máxima expectación ante la llegada del expresidente al tribunal estatal.
Una vez allí, Trump afrontará unos cargos penales que aún no han sido desvelados pero que, según su abogado, serán delitos menores. Tacopina ya adelantó el pasado domingo, en el programa “State of the Union” de la CNN, que “no existió ningún tipo de violación legal con los pagos” realizados a Daniels. “Un fiscal estatal tomó un delito menor, trató de improvisar y lo convirtió en un delito grave al alegar una vulneración de la campaña federal, que la Comisión Federal de Elecciones y el Departamento de Justicia ya dijeron que no existía”, añadió.
Pero una cosa son las declaraciones realizadas en un programa de televisión y otra conseguir convencer de ello al juez Juan Merchan, que será quien presidirá el caso. Ante la duda, Tacopina buscará la desestimación de la acusación aunque no lo hará de forma “inmediata” durante la jornada de hoy.
Se espera que los cargos que se escuchen estarán basados en los pagos realizados por el ex abogado personal de Trump en esa época, Michael Cohen, a Daniels antes de las elecciones presidenciales de 2016, a cambio de su silencio acerca de la aventura extramarital mantenida entre ambos, en 2006.
Los delitos imputados podrían ir desde falsificación de documentos a violación de las reglas de financiación de la campaña electoral, ya que los fiscales federales señalaron que los pagos se realizaron para influir en los resultados de las elecciones presidenciales.
Donald Trump, que está implicado en otras causas judiciales, ya se ha manifestado a través de su red social, Truth Social, agradeciendo el respaldo recibido. “Nunca he tenido tanto apoyo y amor como ahora”, escribió, antes de matizar que ese ánimo esta dirigido “contra los radicales de izquierda, extorsionadores, políticos sinvergüenzas y matones que están destrozando nuestro país”.
El millonario también ha acusado al juez Merchan, que lleva su caso, de “odiarle” y haber sido en realidad designado para el caso por el fiscal de Manhattan Alvin Bragg. El fiscal decidió la implicación de un gran jurado, que fue el que acabó determinando la imputación del acusado.
Lo que aún está por ver son las consecuencias que este proceso puede tener en las aspiraciones presidenciales del magnate, para 2024. De momento, su campaña recaudó 4 millones de dólares el día después de su imputación de los cuales “más del 25 % de las donaciones vinieron de nuevos benefactores”, explicó la organización el viernes pasado en un comunicado.
En la mañana del pasado domingo, Trump también difundió una reciente encuesta en la que saca una ventaja significativa a sus oponentes en las primarias republicanas. Así, el expresidente Trump se muestra líder con el 51% del voto, seguido del gobernador de Florida Ron DeSantis con un 21%, el exvicepresidente Mike Pence con el 6%, Nikki Haley con un 4% y el resto con un 2% o menos. La encuesta está basada en una muestra de 1.000 probables votantes de las elecciones generales de 2024, realizada en nombre de la campaña de Donald Trump para presidente y completada durante el 31 de marzo y el 1 de abril.
Otra encuesta realizada por CNN/SSRS en las mismas fechas, desvela que la mayoría de los estadounidenses está de acuerdo con la decisión del gran jurado de Manhattan de acusar al expresidente Donald Trump. De hecho, un 60% de los 1.048 adultos encuestados entre el 31 de marzo, día posterior a la imputación de Trump y el 1 de abril, aprueba la decisión de presentar cargos contra él.
Además, el 37 % cree que Trump desempeñó un papel ilegal en los pagos clandestinos realizados a Stormy Daniels, el 33 % cree que hizo algo poco ético pero no ilegal, el 10 % dijo que no hizo nada malo y el 20 % señalaron que no estar seguros.