Hallan restos de alimentos y otras pistas de los niños perdidos en la selva colombiana de Guaviare
El Ejército Nacional busca desde hace un mes a los cuatro hermanos en la oscura selva, donde la visibilidad no supera los 20 metros de distancia
El Gobierno de Colombia sigue confiando en que los cuatro niños, que sobrevivieron a un accidente de avión en plena selva amazónica, están vivos
Se cumplen 30 días de la desaparición de los cuatro hermanos, de 9, 13, 4 años y el más pequeño de 11 meses, perdidos en la selva colombiana de Guaviare
Ya son 30 días desde que la avioneta, que sobrevolaba la selva amazónica, se estrellara y comenzara la búsqueda de los cuatro niños que habrían sobrevivido al accidente. Este martes, el Ejército Nacional ha revelado nuevas imágenes y pistas que reviven la esperanza de encontrarlos con vida.
Además de la huella, que sería de Lesly Mucutuy, de 13 años), también encontraron restos de frutas silvestres que habrían sido consumidos por Lesly, Soleiny Mucutuy, de 9 años), Tien Noriel Ronoque Mucutuy, de 4 años) y Cristin Neriman Ranoque Mucutuy, de 11 meses . Según el Ejército, estos frutos demostrarían que están comiendo "para aportar nutrientes y fuerza a los pequeños para sus desplazamientos”
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El general Pedro Sánchez, que dirige la Operación Esperanza, el operativo de búsqueda en el que participan más de 200 militares, dijo que confía en que los niños están vivos por las evidencias que han encontrado, según han publicado medios que siguen la búsqueda.
“Si estuvieran muertos, seguramente sería fácil encontrarlos porque estarían quietos, porque los animales nos orientarían para allá”, ha explicado a una radio colombiana.
Los niños están solos y las señales indican que cambiaron el rumbo
El coronel Fausto Avellaneda, que jefe de la operación en tierra, le explicó a los medios del país, que la nueva huella que se encontraron los soldados está “aproximadamente a unos 2 kilómetros de distancia de la última huella que vamos encontrando, hacia el sector norte”. También confirmó que estas pistas indican que los menores están solos y siguen con vida, aunque habrían cambiado de ruta.
Sobre los restos de mango que han encontrado, el coronel Avellaneda señaló que han mantenido a los niños con vida: “El borojó o como el mango silvestre, que están distribuidos en varias partes de la zona. Varias patrullas de nosotros las han reportado. Al ser ellos de una comunidad indígena, tienen conocimiento de los mismos y creemos que los están consumiendo”.
El coronel Avellaneda también se refirió a las condiciones meteorológicas y del terreno que han obstaculizado la búsqueda: “Las condiciones meteorológicas no han permitido el ingreso. De la distancia que tenemos del punto hasta el sitio donde nos encontramos pueden ser más de 100 millas náuticas aproximadamente, entonces la distancia y el tiempo meteorológico no han permitido hacer la inserción”.
Los mandos del Ejército, al frente de la Operación Esperanza están haciendo de todo por hallar a los cuatro niños: entre las nuevas estrategias para dar con su paradero está el uso de la inteligencia artificial y marcadores sonoros, según explicaron: “Estamos llevando unas cintas con la palabra 'peligro', para señalizar "puntos que llamamos nosotros obstáculos naturales, lo estamos llamando líneas guía. Esa línea guía le estamos colgando silbatos en las cintas" para que en caso de que los niños las encuentren puedan "hacernos señales auditivas y poderlos escuchar”.