Ucrania conmemora los 500 días de guerra con "avances sostenidos" en los frentes del norte y Bajmut

Sobre una isla desierta del Mar Negro, a 45 kilómetros de la costa ucraniana, yacen, según la leyenda, los huesos de Aquiles. Parecía invencible, pero la flecha envenenada de Paris alcanzó su humano talón para vengar la muerte de Héctor. Tres mil años tras la Guerra de Troya, dos navíos rusos atacaron la Isla de las Serpientes y ordenaron a los guardias fronterizos ucranianos que se rindieran. Sobre la tumba del más hermoso, fuerte y valiente de los héroes griegos, uno de esos guardias respondió: "Ruso, vete a la mierda", una frase que se convirtió en símbolo de la resistencia ucraniana. Este sábado se cumplen 500 días de ese 24 de febrero de 2022 en que Putin inició su campaña sobre el país vecino.

La réplica ucraniana no fue suficiente para detener las encomiendas bélicas rusas y el ejército blanco ocupó el peñón de apenas 100 metros cuadrados, suficientes para instalar una base de lance de misiles que azotaron las orillas de Odesa hasta el 14 de abril de 2022, cuando Ucrania logró hundir el Mosvka, buque insignia de la flota rusa en el mar Negro. Los de Putin luego abandonarían la isla ese mismo junio lo cual, con la intervención de Naciones Unidas y Turquía, permitiría la creación de la Iniciativa del Grano del Mar Negro para reanudar las exportaciones de productos agrícolas y alimenticios ucranianos al resto del mundo, uno de los pocos acuerdos a los que han llegado las partes inmersas en conflicto desde el estallido de la guerra.

En esta fecha conmemorativa del inicio de la guerra total, el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, ha publicado un vídeo filmado recientemente en la Isla de las Serpientes en el que promete a amigos y enemigos que recuperará todos los territorios controlados actualmente por las fuerzas militares rusas dentro de la frontera ucraniana. "Aunque es un pequeño trozo de tierra, es una buena prueba de que Ucrania recuperará cada miga de su territorio", reza el mandatario en el audiovisual.

En el vídeo, Zelenski, algunos militares y miembros del gobierno, entre ellos su Jefe de Estado Mayor, Andriy Yermak, depositan flores en la isla en memoria de quienes fallecieron defendiendo Ucrania durante los primeros días de la invasión y el presidente se dirige a la nación para asegurar que Ucrania es "un país de valientes" que no podrá ser conquistado por los "ocupas".

Hablando a cámara, el presidente ucraniano ha agradecido "desde el sitio de la victoria" a los soldados, todos los cuerpos de seguridad, a la población civil y "a todos los que luchan por Ucrania" por los 500 días de resistencia y ha recordado a "aquellos que dieron la vida por Ucrania".

Nuevos avances en las líneas ucranianas

A pesar de las dificultades, las fuerzas ucranianas aseguran haber logrado avances significativos en los últimos meses, obligando a retroceder las fuerzas rusas del norte, este y sur. En un último balance, la Inteligencia militar británica estima que las fuerzas ucranianas han conseguido progresos "sostenidos" en torno a la ciudad de Bajmut, en el este del país, la cual se ha convertido, de nuevo, en escenario de intensos combates.

Según esta última evaluación del Ministerio de Defensa británico, publicada este sábado, Bajmut ha vuelto a ser escenario durante los últimos siete días de algunas de las hostilidades "más intensas a lo largo del frente" después de la relativa calma que perduró durante el mes pasado.

La Inteligencia británica anticipa problemas para las fuerzas rusas en la ciudad y apunta que "probablemente están padeciendo ahora mismo problemas porque la moral es baja, están mezclando unidades variopintas y su capacidad para encontrar y atacar la artillería ucraniana que les está disparando está limitada".

No obstante, Londres entiende que el Kremlin percibe una expulsión de Bajmut como "políticamente inaceptable", dado el "peso simbólico" que representa al tratarse de uno de los pocos escenarios de victoria rusa durante el último año, de ahí su enorme resistencia a capitular.

Sin embargo, el Ministerio de Defensa entiende que Rusia no tiene mucha capacidad de maniobra con vistas a futuro dado que es muy probable que existan pocas reservas adicionales de fuerzas a desplegar en este sector.

El acuerdo del grano, en peligro

Tras varias prórrogas de la Iniciativa del Grano del Mar Negro, Moscú ha advertido que el pacto no se extenderá más allá del 17 de julio si por esa fecha no se han subsanado los fallos del acuerdo, que consideran beneficia más a Ucrania, pues los productos rusos no están siendo transportados.

En respuesta a las demandas de Putin, el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, ha defendido este viernes la importancia del acuerdo y ha pedido la continuación de este compromiso para "ayudar a garantizar que estos productos puedan llegar a los mercados globales sin problemas, de manera eficiente y a escala" y ha subrayado el carácter "indispensable" de este pacto sellado entre Rusia y Ucrania "en apoyo a la seguridad alimentaria mundial".

"Estos acuerdos son una demostración de lo que el mundo puede hacer cuando se concentra en los grandes desafíos de nuestro tiempo", ha expresado el secretario general de la ONU en un comunicado, y ha argumentado que "juntos, los acuerdos están contribuyendo a reducciones sostenidas en los precios mundiales de los alimentos, que ahora están más de un 23 por ciento por debajo de los máximos históricos alcanzados en marzo del año pasado".

Asimismo, Guterres ha hecho un llamamiento a priorizar la seguridad alimentaria global y ha asegurado que tanto él como su equipo continúan "plenamente comprometidos a aprovechar los progresos ya realizados".

Por su parte, Recep Tayyip Erdogan, presidente de Turquía, país clave en las mediaciones sobre este acuerdo, también se ha pronunciado en favor de continuar el trabajo de la Iniciativa de Granos del Mar Negro: "Estoy convencido que todas las partes interesadas actuarán con este propósito, siendo conscientes de la responsabilidad global", ha sentenciado el mandatario turco.

"Ucrania merece ser miembro de la OTAN"

Tras casi año y medio de guerra, Zelenski ha terminado este viernes su última gira europea en Estambul para reunirse con su homólogo turco, quien ha asegurado que Ucrania "merece ser miembro de la OTAN". "Quiero enfatizar una vez más que nadie perderá con la llegada de una paz justa. Brindaremos cualquier apoyo para que Ucrania se recupere", ha explicado Erdogan en una rueda de prensa recogida por el medio Ukrinform, a lo que ha añadido que las empresas de construcción turcas están preparadas para la reconstrucción de Ucrania.

El líder turco ha relatado que "desde la anexión de Crimea, contraria al derecho internacional, hasta el día de hoy, declaramos en todas las plataformas nuestro apoyo a la integridad territorial, la soberanía y la independencia de Ucrania. Y demostramos nuestra solidaridad con Ucrania en la práctica brindando asistencia concreta en los ámbitos político, económico, humanitario y técnico". "También nos hemos convertido en el país que más esfuerzos realiza para poner fin a la guerra", ha recalcado.

Respondiendo a una pregunta sobre la posible liberación de presos políticos y prisioneros de guerra en la Federación Rusa, Erdogan ha asegurado que continúan los esfuerzos en esta dirección, incluido el diálogo con Rusia, y ha anunciado la visita del presidente ruso, Vladimir Putin, a Turquía la próxima semana. Sobre el tema de los presos, Zelenski ha asegurado que es el primer punto que han abordado en su reunión y ha enfatizado que "realmente estamos trabajando en ello".

Rusia amenazada por las bombas racimo estadounidenses

En estos 500 días de guerra, Ucrania ha recibido el apoyo la mayoría de países occidentales, quienes también han donado importantes cuantías de material militar a las fuerzas de la armada de Kiev. Recientemente, Estados Unidos ha anunciado un nuevo paquete de ayudas por valor de 800 millones de dólares, que contiene las conocidas como "bombas racimo", un tipo de proyectil que se fragmenta en decenas de explosivos más pequeños para cubrir un amplio espectro, lo que lo convierte en especialmente mortífero para la población civil.

El embajador de Rusia en Estados Unidos, Anatoli Antonov, ha considerado públicamente que la decisión de enviar bombas racimo a Ucrania es otra provocación estadounidense que "acerca a la humanidad a una nueva guerra mundial".

El embajador ruso ha señalado, en declaraciones a los medios de comunicación, que "las provocaciones estadounidenses están realmente fuera de escala" y que Washington está "tan obsesionado con la idea de derrotar a Rusia que no se da cuenta de la gravedad de sus acciones". La injerencia de la potencia occidental "solo provoca más bajas y prolonga la agonía del régimen de Kiev", reza un comunicado compartido por la Embajada rusa.

Desde Rusia han denunciado, además, que Estados Unidos "ha ignorado las opiniones negativas de sus aliados sobre los peligros del uso indiscriminado de municiones racimo", del mismo modo que ha hecho "la vista gorda ante las bajas civiles".

No obstante, Antonov ha asegurado que "bombardear a la república con armas occidentales de ninguna manera obstaculizará el camino hacia los objetivos de la operación militar especial destinada a erradicar las amenazas de seguridad de la Federación Rusa, incluido el nazismo alimentado en Ucrania".