La guerra arancelaria de Trump contra China, un duelo entre gigantes con España en medio por la visita de Pedro Sánchez a Xi Jinping

El mundo permanece atento a los bandazos de Donald Trump. El presidente estadounidense sorprendía ayer con una tregua arancelaria de 90 días para todos los países que no hubiesen tomado represalias con EEUU y estuviesen en negociación, dejando las tasas en un 10% universal para todos los países, a excepción de México, Canadá y China, con quien, al contrario, la guerra comercial se acentúa hasta límites insospechados incluso para los expertos.

Después de jactarse de los efectos de su política arancelaria, Trump acabó ayer con su anunciadísimo ‘Liberation Day’ (Día de la Liberación) en un instante, aunque atribuyéndose honores también por ello. Ni una semana ha durado. Lo que perdura es la demoledora lucha contra China, que mantiene la preocupación por su impacto en el mercado global, como informan en el vídeo Teresa Fernández Cuesta e Iñaki Aguado.

Aunque las bolsas han rebotado y se han recuperado con el anuncio de la tregua, el mandatario norteamericano hizo ayer otro movimiento: subir aún más los aranceles al gigante asiático, pasándolos del 104% que entró en vigor ayer al 125% que decretó ni 24 horas después.

Donald Trump dinamita la guerra comercial Estados Unidos - China

Así, la cuestión ahora es cómo se consigue rebajar la tensión entre ambas naciones. La guerra comercial es en estos momentos, sobre todo, cosa de dos, y un divorcio de las dos superpotencias dañaría la economía mundial.

Donald Trump, que presume de su relación con el líder ruso Vladímir Putin y con el norcoreano Kim Jong Un, ha despertado ahora al dragón chino. Tras elevarle los aranceles al 125%, desde Pekin advierten: “Si quieren luchar, lucharemos hasta el final”.

En medio de la guerra comercial abierta, China ha emitido incluso una alerta de viaje para aquellos ciudadanos que estén planteando viajar a Estados Unidos, advirtiéndoles de que “evalúen completamente los riesgos de viajar” y lo hagan “con precaución” ante el “deterioro de las relaciones económicas y comerciales”.

Mientras, algunos comercios online chinos ya han subido un 70% los precios estadounidenses, siendo que China decretó, en respuesta a la política de Trump, hasta un 84% de tasas arancelarias sobre los productos estadounidenses.

La postura de China ante los aranceles de Trump: “No les tememos”

Entre tanto, el Gobierno de China se mantiene sumamente férreo en su posición. “La puerta está abierta al diálogo”, pero si tiene lugar en igualdad de condiciones y sobre la base del respeto mutuo, en lugar de con amenazas y chantajes, de lo que acusan a la Administración Trump. De lo contrario, insisten, lucharán “hasta el final”.

"La postura de China es consecuente y clara: si quieren dialogar, la puerta está abierta; si quieren luchar, lucharemos hasta el final", ha dicho exactamente una portavoz del Ministerio de Comercio de China, subrayando que “la presión, las amenazas y el chantaje no son la manera correcta de tratar con China”.

A ese respecto, esperan en que Trump recapacite también en este enfrentamiento con el que es el mayor productor y exportador del mundo, resolviendo adecuadamente las diferencias mediante el diálogo y la consulta, "con un espíritu de respeto mutuo", coexistencia pacífica y cooperación mutuamente beneficiosa.

Así, inciden en que Estados Unidos debe corregir sus prácticas erróneas y crear un ambiente y condiciones para el diálogo y la consulta "en igualdad de condiciones entre ambas partes".

"No provocamos problemas, pero no les tememos", advierten las autoridades chinas, añadiendo que no se puede privar al pueblo chino de su legítimo derecho al desarrollo ni violar la soberanía, la seguridad y los intereses de desarrollo de China y otros países del mundo.

"No hay ganadores en una guerra comercial y el proteccionismo no tiene salida. Si Estados Unidos insiste en su propio camino, China luchará hasta el final", reiteran, aseverando que “nunca” aceptarán la presión extrema ni la intimidación de Estados Unidos”. “Tomaremos medidas firmes y enérgicas para defender nuestros derechos e intereses legítimos", apostillan.

La visita de Pedro Sánchez a China

Entre ambos, aparece además España, con Pedro Sánchez reuniéndose este jueves con el presidente chino, Xi Jingping.

A propósito de ello, el Gobierno de Estados Unidos lanzó un mensaje claro a través del secretario estadounidense del Tesoro, Scott Bessent, que reprochó a España que alinearse más con China "sería como cortarse el cuello".

Frente a ello, Pedro Sánchez ha defendido “un mundo de puertas abiertas” celebrando, en la misma línea, la tregua arancelaria anunciada por Donald Trump, ante la cual la Unión Europea ya ha respondido acordando, igualmente, paralizar durante 90 días sus aranceles sobre EEUU.

Por su parte, y ante la visita oficial del presidente al gigante asiático, desde el PP han cuestionado el viaje, del que dicen que puede debilitar las relaciones de España y la UE con Estados Unidos. Todo, además, mientras el Ministro de Economía busca con los consejeros de las autonomías el escudo para las empresas afectadas por los aranceles, con los de Alberto Núñez Feijóo pidiendo que no se hable de cuotas por territorios.

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