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Ha costado semanas de negociaciones, pero finalmente el Gobierno italiano ha conseguido sacar adelante su segundo paquete de ayudas directas a ciudadanos y empresas. Italia destina 55.000 millones de euros, que se unen a los 25.000 ya aprobados en marzo. El encargado de presentarlo fue el primer ministro, Giuseppe Conte, que compareció con los titulares de todos los ministerios implicados. "Se trata de un texto tan complejo como dos leyes de presupuestos", afirmó Conte. El decreto, llamado “relanzamiento Italia”, ha provocado una áspera polémica entre los socios de Gobierno, el Movimiento 5 Estrellas (M5E) -dividido en diferentes facciones- y el socialdemócrata Partido Democrático (PD).
La medida más controvertida era la regularización de cientos de miles de inmigrantes ya presentes en Italia. El objetivo era que suplieran la falta de mano de obra en el campo, aunque también se amplía a otros colectivos como los trabajadores del hogar. Finalmente, el Ejecutivo ampliará el permiso de residencia por seis meses a quienes les caducó el 31 de octubre de 2019, como muy tarde. Se trata de una regularización parcial. Es decir, no habrá papeles para todos, pero una buena parte de ciudadanos irregulares podrán ponerse en regla. Se calcula que hay unos 600.000 migrantes en Italia en estas condiciones, aunque el Ejecutivo calcula que podrían acogerse a ella unos 200.000.
La regularización podrá producirse por dos vías: mediante la solicitud del interesado o del propio empresario que reconozca que tenía trabajadores en negro. Quedan excluidos los trabajadores que hayan cometido delitos o sobre los que pese una orden de expulsión y contratantes condenados por favorecer la inmigración clandestina, actividades ilícitas o la prostitución. El M5E, reacio en un principio a aprobar esta norma, ha aceptado la fórmula.
La ministra de Agricultura, Teresa Bellanova, que había amenazado con dimitir si no salía adelante, anunció su aprobación entre lágrimas. "Para algunos esto será accesorio, pero para mí es fundamental. Hoy los invisibles serán menos invisibles, hoy vence el Estado, porque es más fuerte que la criminalidad", dijo una mujer que empezó a trabajar como temporera con 14 años.
La otra disposición estrella es la concesión durante dos meses de una renta básica de emergencia que irá de 400 a 800 euros, según la composición del núcleo familiar. La cuantía máxima sólo le será otorgada a hogares en los que haya al menos un miembro con discapacidad o autosuficiente. Este subsidio ya existía en Italia, pero se amplía para todas las familias con una renta máxima de 15.000 euros anuales. También se rebajan las condiciones para percibir la renta de ciudadanía, una medida ya aprobada por el M5E en su anterior etapa de Gobierno con la Liga.
Tendrán libertad para acogerse a un ERTE durante nueve semanas adicionales, que se unen a las otras nueve aprobadas en marzo. Se calcula que en este tiempo, unos ocho millones de trabajadores están bajo un expediente de regulación de empleo. Además, las empresas con una facturación inferior a 250 millones de euros estarán exentas de pagar el impuesto de sociedades de mayo y junio. Para ello no tendrán que demostrar, como sucedía hasta ahora, haber perdido al menos un tercio de sus ingresos.
Las pequeñas y medianas empresas recibirán también ayudas a fondo perdido, que van desde los 1.000 euros a 62.000. Dependerá de su tamaño y de las pérdidas cosechadas. También disfrutarán de un crédito de hasta el 60% en el pago de recibos o el alquiler de los locales.
Se amplía la ayuda de 600 euros concedida a los autónomos al menos durante el mes de mayo. Y para quienes hayan vista reducida su actividad un 33% podría llegar a 1.000 euros. Los trabajadores domésticos y empleados del hogar también percibirán 600 euros. El primer ministro afirmó que tanto estas ayudas como la asignación de los ERTE llegarán antes al haber agilizado los trámites burocráticos. Millones de profesionales se habían quejado del retraso en el cobro.
El Estado reforzará la Educación con 16.000 nuevos profesores en septiembre y 4.000 nuevas plazas para investigadores. La Sanidad sumará 9.600 enfermeros y 3.500 plazas las unidades de cuidados intensivos. Además, se potenciará la asistencia territorial. También se dobla la cantidad ofrecida a las familias para contratar a cuidadores de niños de 600 a 1.200 euros.
Otra de las medidas más llamativas es la concesión de un crédito de hasta 500 euros a las familias para destinarlo al pago de hoteles o alojamientos turísticos en Italia. Se ha llamado “bonus vacaciones” y tiene como intención potenciar el turismo local, ya que la llegada de extranjeros parece complicada. La asignación bajará a 300 euros para familias de dos personas y a 150 para un único ciudadano. Los establecimientos turísticos dejarán de pagar el IBI durante el verano.
También es novedosa la subvención para la compra de bicicletas, monopatines o monociclos, utilizados para desplazarse por la ciudad. El Estado asumirá hasta el 60% de su coste en compras inferiores a 500 euros. Rige para ciudades superiores a 50.000 habitantes, donde el objetivo es descongestionar el transporte público y reducir el uso del coche. Además, las obras en los edificios para una mayor eficiencia energética tendrán una deducción del 110%. Es decir, el Estado asumirá el coste completo y además aportará un 10% extra.
Con todas estas medidas Italia pretende avanzar en la recuperación de su economía, que este año caerá un 9,5%, según las previsiones de la Comisión Europea. Ya el 18 de mayo anticiparán su apertura total bares, restaurantes y peluquerías en la mayoría de las regiones. El ministro de Deportes, Vicenzo Spadafora, ha asegurado que los gimnasios y centros deportivos estarán abiertos para el 25 de mayo. Mientras, se espera que se retome la movilidad entre regiones a principios de junio.