Kiev, en alerta total mientras Rusia recrudece sus ataques en el Donbás

Todas las miradas están puestas en los próximos movimientos que se produzcan en Kiev, después del acuerdo entre Ucrania y Rusia y por el que Vladimir Putin se ha comprometido a rebajar la ofensiva sobre la capital ucraniana. El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, se muestra optimista, pero pide cautela y, teniendo en cuenta los bombardeos de anoche puede que lleve razón.

Desde la capital, Jairo Vargas, explica que Kiev está en alerta total después de que anoche, a partir de las 20:30 horas, comenzaran una serie de nuevos bombardeos que se prolongaron durante más de dos horas.

Las autoridades ucranianas, como es habitual, no han informado el lugar donde han impactado esos misiles rusos. Este ataque se produce horas después de que Rusia anunciara, tras las conversaciones de paz en Estambul, que reduciría drásticamente su actividad militar en Kiev y Chernígov.

Cinco días después de que Rusia anunciara que sus tropas se centrarían en el Donbás, un territorio que los separatistas prorrusos controlaban ya en parte desde 2014, los ataques de las fuerzas de Moscú contra esta zona se han recrudecido.

No solo en Kiev han sonado las alarmas antiaéreas, también en Yitomir, Járkov, Dnipro y Poltava. Además, en la región de Lugansk, un gasoducto de alta presión ha resultado dañado debido a un bombardeo de las tropas rusas, ha asegurado en Telegram el jefe de la administración militar regional de Lugansk, Sergii Haidai, tal y como recoge la agencia de noticias Ukrinform.

El gobernador ucranio de la región de Donetsk, Pavlo Kyrylenko, también ha afirmado que la situación es difícil en todas las ciudades a lo largo del frente que separa el territorio controlado por el Gobierno de Ucrania de las áreas en poder de los separatistas, con bombardeos de las tropas de Moscú. Según ha dicho Kyrylenko en un mensaje en la televisión nacional, las fuerzas rusas concentran sus esfuerzos para atacar la región de Donetsk y la situación puede empeorar. Un asesor del presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, también ha afirmado que Rusia está moviendo tropas del norte de Ucrania al este para centrar su ofensiva en esta zona del país.

Ataques de Rusia contra la región de Lugansk

Como resultado de los daños en el gasoducto, 35.000 personas de las localidades de Lisichansk, Privillya, Novodruzhesk, Bilohorivka, Zolotarivka y Shipylivka se han quedado sin suministro de gas.

Además, según ha informado Ukrinform, las tropas rusas han lanzado ataques aéreos este martes en la región de Lugansk y, en concreto, en las áreas de los asentamientos de Voevodovka, Rubizhne, Lisichansk, Kreminna, Zolote y Popasna. En Severodonetsk y las aldeas de la comunidad han sufrido fuertes bombardeos esta mañana.

La desconfianza de Estados Unidos

Eso es precisamente de lo que advierten las autoridades estadounidenses. El Pentágono cree que el movimiento de tropas de Rusia, ya lejos de Kiev por la resistencia ucraniana, no es una retirada real sino un "reposicionamiento" de tropas.

"Creemos que esto es un reposicionamiento, no una retirada real, y deberíamos estar preparados para una ofensiva mayor en otras áreas de Ucrania. Esto no significa que la amenaza hacia Kiev haya terminado", ha aclarado el portavoz del Pentágono, John Kirby, en rueda de prensa. Además, EEUU señala que no ha desaparecido el peligro sobre la capital de Ucrania.

En la misma línea se sitúa el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, que a pesar de mostrarse optimista tras la reunión de ayer con Rusia en Estambul pide cautela y no bajar la guardia.