Medidas que no puedes dejar de tomar frente al coronavirus en tu día a día

Con la incidencia de covid-19 en España en niveles extremos, cercana al umbral de los 900 por cada 100.000 habitantes y con seis comunidades por encima de los 1.000, conviene más que nunca seguir extremando las precauciones en el día a día. Si visitas lugares públicos en tu comunidad, es importante seguir cumpliendo una serie de medidas para protegerte del coronavirus. Nunca está de más repasar todo lo que debes saber.

La mejor manera de protegerte del covid-19 es evitar la exposición. Si sales, ponte una mascarilla. Mantente a una distancia de aproximadamente 2 metros de otros, especialmente si corres un riesgo más alto de una enfermedad grave. Evita el contacto cercano con cualquier persona que esté enferma o que presente síntomas. También evita eventos con mucha gente y reuniones multitudinarias.

Además, practica buenos hábitos de higiene. Lávate las manos con frecuencia con agua y jabón por lo menos por 20 segundos, o usa un desinfectante para manos con base de alcohol que contenga al menos 60% de alcohol. Cúbrete la boca y la nariz con el codo o un pañuelo descartable al toser o estornudar y luego lávate las manos o usa un desinfectante para manos. Evita tocarte los ojos, la nariz, y la boca.

Si no te sientes bien, quédate en casa. No visites lugares públicos excepto para recibir atención médica. Evita tomar transporte público si estás enfermo. Si corres un riesgo más alto de una enfermedad grave, evita salir a la comunidad en cuanto sea posible. Es más seguro quedarte en casa. Si las otras personas que viven en tu casa vuelven al trabajo o visitan lugares donde no es posible mantener distancia física, se recomienda que se aíslen de ti.

Más allá de las precauciones generales para prevenir el covid-19, ten en cuenta los consejos de seguridad específicos cuando visites diferentes lugares públicos.

Antes de ir a un restaurante o bar, verifica las prácticas de seguridad. Averigua si los empleados usan mascarillas de tela, desinfectan regularmente las superficies de alto contacto y mantienen el distanciamiento social. Comprueba también si hay buena ventilación, si las mesas están lo suficientemente separadas entre sí como para permitir el distanciamiento social, si es posible comer en una mesa al aire libre o si el menú es digital o desechable.

Evita ir en los horarios más concurridos del día o la noche, y no te quedes mucho tiempo. Lo ideal sería que el restaurante no ofreciera bares de ensaladas, bufets y autoservicio de bebidas que requieran el uso de utensilios o dispensadores comunes.

Si debes esperar en fila para recibir algún servicio en un restaurante o bar, mantén una distancia de al menos 2 metros de otras personas. Usa la mascarilla la mayor cantidad de tiempo posible cuando no estés comiendo o bebiendo de manera activa. Limita la cantidad de alcohol que consumes, ya que el consumo de alcohol puede reducir las posibilidades de que sigas las medidas de seguridad. Si es posible, usa las opciones de pago sin contacto.

Si pides comida para llevar, intenta pagar online o por teléfono para limitar el contacto con otras personas. Si te entregan comida, solicita que la dejen fuera de tu casa en un lugar seguro, como el porche o el vestíbulo de tu edificio. De lo contrario, mantén una distancia de al menos 2 metros del repartidor. Si vas a retirar la comida en el restaurante, mantén el distanciamiento social mientras esperas la entrega. Después de llevar la comida a tu casa, lávate las manos o usa un desinfectante de manos.

Antes de ir a una sede religiosa, controla si se limita la cantidad de personas en las reuniones y cómo eso podría afectar tu visita. Busca oficios religiosos que se realicen en áreas grandes y con buena ventilación o al aire libre. Mantén el distanciamiento social durante los servicios.

Además, evita el contacto con objetos que se tocan con frecuencia, como los libros. Coloca las donaciones en una caja de recolección estacionaria. Si ofrecen comida en un evento, elige alimentos que vengan previamente empaquetados.

Antes de ir al gimnasio, usa las opciones de reserva online. Es posible que tengas que reservar un bloque de tiempo con antelación y el personal debe limpiar las instalaciones entre un bloque y otro. Quizás tengas que completar formularios adicionales sobre salud y te tomen la temperatura antes de entrar al gimnasio. Pregunta sobre las políticas de limpieza y desinfección de las instalaciones y si podrás usar el vestidor o el baño. Si te interesan las clases de ejercicios en grupo, pregunta si se ofrecen en forma virtual.

Evita ir al gimnasio en los horarios más concurridos del día o la noche. Si es posible, elige un gimnasio con espacios al aire libre y regístrate por vía electrónica. Probablemente tu gimnasio exija el distanciamiento social bloqueando el acceso a las máquinas de cardio de manera que haya siempre una libre entre dos ocupadas o colocando barreras alrededor de los equipos. Sigue las pautas del gimnasio y mantén una distancia de al menos 2 metros de los demás miembros.

Limpia los equipos antes y después de usarlos. Algunos equipos difíciles de limpiar, como los rodillos de gomaespuma y los bloques de yoga, podrían no estar disponibles. Limita la actividad de alta intensidad en espacios cerrados. Evita saludar chocando los cinco o con los codos. Si corres un riesgo más alto de enfermedad grave, podrías considerar esperar para volver al gimnasio.

Cuando pidas una cita para arreglarte el cabello o las uñas, pregunta sobre las medidas de seguridad. Quizás te pidan que vayas a tu cita solo, que te laves el cabello en casa para reducir el número de personas cerca del área donde lavan el cabello en el salón y que esperes en el coche o afuera hasta que comience tu cita. Además, pregunta si ofrecen secado con secador. Eliminar el secado con secador podría reducir la propagación de los gérmenes.

Usa la mascarilla durante todo el tiempo que estés en el salón de belleza. Lo ideal sería que el salón dé citas escalonadas para limitar la cantidad de gente que se atiende al mismo tiempo. Podrías preguntar sobre las medidas de desinfección del salón. Averigua si el personal limpia regularmente las superficies de alto contacto, las sillas y los reposacabezas se desinfectan después de su uso, el personal usa mascarillas de tela y se lava las manos regularmente. Pregunta si usan guantes descartables para manicuría y pedicuría, y para tratar el cutis.

Para facilitar el distanciamiento social, visita la tienda de comestibles temprano a la mañana o tarde a la noche, cuando es posible que haya menos gente. Si tienes un mayor riesgo de presentar una enfermedad grave, averigua si la tienda tiene un horario especial para las personas en tu situación y haz tus compras en ese horario. También podrías considerar comprar tus comestibles en línea para entrega a domicilio o para retirarlos en la puerta del negocio.

En la tienda, desinfecta el asa del carrito o de la cesta de compra. Mantén una distancia de al menos 2 metros de las demás personas mientras haces las compras y cuando esperas en la fila. Si es posible, paga sin tocar dinero ni teclados, o usa un desinfectante para manos después de pagar. Además, usa desinfectante para manos después de salir de la tienda. Cuando llegues a casa, lávate las manos. Si usas bolsas de compra reutilizables, límpialas antes de usarlas.

Durante las visitas al banco, si es posible, usa el cajero automático. Limpia el teclado del cajero automático con una toallita desinfectante antes de usarlo. Cuando termines, usa desinfectante para manos. Lávate las manos cuando llegues a casa.

Antes de cargar gasolina, limpia todas las manijas o los botones que debas tocar. Cuando termines de cargar combustible, usa desinfectante para manos. Lávate las manos cuando llegues a casa o la próxima vez que estés cerca de un lavabo.

Planea hacer un pedido y retirar todos los medicamentos recetados al mismo tiempo. Si es posible, haz el pedido de medicamentos recetados con anticipación y retíralo a través de la ventanilla para atención al cliente desde tu coche o en la puerta de la farmacia, pídelo por correo o usa otro servicio de reparto. Pídele al médico o al farmacéutico que te receten más cantidad de medicamento para no tener que ir la farmacia tan a menudo.

Antes de hacerte un masaje, pregunta cuáles son las precauciones que el masajista está tomando para prevenir la propagación del coronavirus. Lo ideal es que el número de personas en el local se limite para permitir el distanciamiento social y que puedas registrar la entrada y la salida con herramientas virtuales.

Las salas de masaje, las áreas comunes y cualquier objeto que puedas tocar deben limpiarse, desinfectarse y esterilizarse a fondo. Pregunta sobre las políticas de lavado de la ropa de cama, toallas y otros artículos lavables. Los masajistas deben seguir protocolos de lavado de manos e higiene y utilizar equipos para protegerse, como guantes y mascarillas.

Antes de salir, averigua si los parques, las instalaciones recreativas, las masas de agua naturales, las playas y las áreas para nadar están abiertos. Averigua si los baños y los puestos de venta de comida también están abiertos.

Elige un parque que esté cerca de tu casa. Los viajes a menudo implican paradas, que pueden exponerte al virus. Mantén distancia entre tú y los demás cuando uses las piscinas.

Mientras estés en el parque, busca áreas abiertas, senderos y caminos que te permitan mantener una distancia de 2 metros de los demás. Evita las áreas concurridas.

Ten en cuenta que las pautas pueden cambiar. Infórmate. Además, no tengas miedo de hacer preguntas. Si no te sientes seguro con las medidas de seguridad de un negocio, aplaza tu visita. Proteger tu salud vale la pena.