La Guardia Civil sigue investigando el horrible crimen de Benahavís, en Málaga. La búsqueda con perros ha dado sus frutos y han encontrado al menos dos huesos más. Dispersos en la misma zona donde Bartolo, el jardinero, encontró la calavera y los primeros huesos, largos y de la cadera y el pubis. Bartolo explica que hizo dos fotografías para alertar a la Guardia Civil. El administrador de la finca avisó. Cuando llegaron los guardias, la científica y el forense recogieron todos los huesos que estaban dispersos por la finca.
El jardinero cree que han sido los jabalíes que han desenterrado quizá la maleta con los huesos. Porque junto a los restos óseos hallaron la maleta roja (según fuentes de la investigación no es morada es de color rojizo), dura, de cuatro ruedas que está siendo analizada en criminalística por si el cadáver descuartizado estuvo dentro; tiene manchas en el forro. También analizan las fregonas y la ropa. Además hay dos discos de una sierra radial oxidados. El jardinero cree que los discos deben ser de la obra y los forenses no han visto cortes en los huesos compatibles con la sierra.
Lo que sí explica Bartolo es que hace pocos años que está en pie la urbanización de Benahavís. “Antes era todo monte” explica. Los huesos están ya en el instituto de medicina legal donde intentan obtener el perfil biológico. Ya saben que pertenece a una mujer mayor de 25 años y menor de 35. El experto Miguel Botella, catedrático de antropología física UGR, nos dice que con una primera visión en los dientes que "se nota que es una persona joven".
Además, por el estado de momificación parcial podría pensar que lleva al menos de 10 años muerta. Todo depende del lugar y el clima. Sí estaba en una maleta puede dar una data más baja de los 10 años. “Los huesos hablan mucho y con el esqueleto completo se puede saber la causa. Nos puede hablar incluso del tipo étnico o sus hábitos. Si hay muerte violenta que afecte a los huesos se verá, cualquier trauma está en los huesos”.
Las marcas dirán como la mataron. De momento, ya rebuscan en las mujeres desparecidas de la zona como Agnes Klavina, desaparecida a la salida de una discoteca de Puerto Banús en 2014. Los dos acusados fueron grabados por las cámaras cuando se la llevaban pero no fueron condenados por el crimen, solo se les condenó por coacciones. En las cámaras de seguridad se veía cómo la joven letona de 30 años subía a un Mercedes S63 AMG en compañía de Westley Capper e Ian Porter, que fueron procesados por su secuestro pero condenados solo por coacciones. El primero, a dos años de prisión y el segundo a seis meses.
Sin embargo, la sentencia dejaba la incógnita de dónde está Agnes. El juez apuntaba en su escrito a que en una cámara de veía a uno de los acusados portando una maleta roja y agachando la cabeza para que la cámara no captara su imagen. Los investigadores de Guardia Civil están recibiendo datos de otros cuerpos policiales con perfiles de desaparecidas que se adaptan al perfil que se está dibujando con el avance de la investigación.
Habían pensado también en la desaparición de Amy Fitzpatrick en el Año Nuevo de 2008 en Mijas Costa, Pero la irlandesa tenía 15 años, no coincide con los datos que tienen hasta ahora, Amy Fitzpatrick se despidió de su amiga Ashley Rose, con quien había estado cuidando al hermano de Ashley. Debería haber llegado a su casa unos minutos más tarde, ya que se encontraba a poca distancia a pie. Nunca llegó. No dejarán de mirar tampoco otras desapariciones que ocurrieron fuera de la provincia de Málaga. A la espera de conseguir un ADN se están cotejando otras desapariciones que coinciden en edad y fechas como Lourdes García en Roquetas o Ángeles Zurera en Córdoba.