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Seguro que si usted es padre o madre habrá pasado por una situación parecida o conocerá algún caso cercano. Niños que duermen mal durante meses e incluso años y que agotan hasta la extenuación a sus progenitores, incapaces de descansar lo suficiente. Solo los que han pasado por esa situación saben lo que se sufre en esas circunstancias. Y ahí entra en juego la palabra clave sobre la que gira este artículo, la melatonina. En determinados casos, los pediatras recetan esta hormona para 'facilitar' el sueño de los más pequeños, aunque también se pueden encontrar en herbolarios productos que la contienen. Por eso, muchos progenitores se plantean preguntas como estas: ¿es seguro darle melatonina a los niños?, ¿en qué dosis?, ¿en qué ocasiones?, ¿cómo hay que hacerlo?
Un estudio reciente, publicado en la revista científica JAMA, detectó que en 25 productos de melatonina de venta libre, la dosis real difería significativamente de la anunciada. ¿Es algo que también puede ocurrir en España?, ¿qué dicen los médicos? En NIUS vamos a intentar responder a estas preguntas recabando información de pediatras, padres y expertos. En primer lugar, hay que saber de que estamos hablando exactamente.
La melatonina es una hormona que se produce en nuestro organismo durante la fase oscura del día. Su función fisiológica es regular los ciclos de día y noche (de vigilia y sueño). Su presencia en la sangre varía, siendo mayor durante la noche y menor cuando hay luz. Según la Asociación Española de Pediatría (AEP) se asocia al control de los ritmos circadianos (que se consolida entre los 4 y 6 meses de vida) y a la adaptación al ciclo de luz-oscuridad. También a un efecto hipnótico y una mayor propensión al sueño.
La melatonina se suele tomar para 'facilitar' el poder dormir cuando hay dificultades por la alteración del ritmo sueño-vigilia. Es de origen vegetal y suele presentarse en gotas, cápsulas e incluso gominolas. No se recomienda para niños menores de seis meses, y a partir de entonces sí se ha demostrado su eficacia, aunque siempre debe estar recetada por un pediatra o un médico experto en sueño. Es vital controlar las dosis y la duración del tratamiento, destacan desde la AEP.
La cantidad de melatonina habitualmente recomendada oscila de 1 a 3 mg al día. La duración del tratamiento no se recomienda más allá de 4 semanas en lactantes. En niños mayores se puede usar durante más tiempo. Los pediatras recuerdan que el uso de la melatonina debe acompañarse de medidas de higiene del sueño, ambientales y de alimentación. Es decir, crear rutinas previas al sueño, tener horarios fijos y evitar siestas prolongadas
Sí, especialmente desde el inicio de la pandemia. Según los datos de IQVIA, multinacional estadounidense que presta servicios a las industrias de tecnología de información de salud e investigación clínica, en marzo de 2022 se habían vendido un 14 % de productos de melatonina que el año anterior. "Lo vemos cada día y sobre todo en un barrio como este, que está lleno de niños", confirma a NIUS una farmacéutica de Las Tablas, en Madrid. "Muchos padres vienen con la receta de su pediatra, pero otros muchos llegan diciendo que han escuchado hablar de la melatonina y la quieren sin receta. Pero claro, así no se puede vender".
La melatonina recetada por los pediatras solo se puede comprar en farmacias. La clave está en si el producto contiene 2 miligramos de melatonina. Si está por encima de esa cifra se considera medicamento y se vende en farmacias como el resto de los fármacos. Pero si contiene menos de esa cantidad, está autorizada su venta libre, de ahí que sea habitual que pueda comprarse en los herbolarios.
Las cuatro principales sociedades científicas pediátricas (AEP, SEPEAP, AEPap y SENEP) han mostrado su preocupación por el "abuso" de preparados de melatonina en la población infantil. “La libre comercialización de los preparados de melatonina como complemento dietético ha facilitado su adquisición y uso por la población general sin necesidad de indicación ni control médico, aunque el uso de melatoninas comercializadas como complemento dietético puede ser menos segura y menos eficaz”, denuncia el doctor Fernando Martín del Valle, neuropediatra del Hospital Universitario Severo Ochoa de Leganés (Madrid). Martín del Valle destaca que aunque la melatonina presenta un amplio perfil de seguridad, “esta tiene efectos a múltiples niveles y se desconoce actualmente cuál puede ser el efecto a largo plazo, por lo que su uso debería estar limitado a 4 semanas en niños, y siempre bajo control médico”.
Un estudio, publicado recientemente en la revista científica JAMA, encontró que en 25 marcas de gomitas de melatonina de venta libre, la dosis real difería significativamente de la anunciada. Se encontró que un tipo de gominola contenía casi 3,5 veces la cantidad de melatonina indicada en la etiqueta. En España los pediatras piden un mayor control para evitar casos parecidos. "Pedimos la limitación de la libre dispensación de melatonina en formato adaptado a la población infantil. También un aumento de los controles de calidad y composición de los productos con melatonina para la población infantil que garanticen su composición", reclama el doctor Fernando Martín del Valle.
La revista científica Scientific American recoge datos que hacen referencia a Estados Unidos. Destaca que entre 2021 y 2022 dos niños fallecieron de entre los 27.700 que tuvieron que ser atendidos por ingestión pediátrica de melatonina en los hospitales del país. El concepto de "sobredosis" sigue siendo controvertido para los expertos, que no han sido capaces de determinar cuál es la cantidad necesaria para producir esa "sobredosis". En lo que sí coinciden es en destacar cuáles son los efectos secundarios que puede provocar la melatonina: náuseas, vómitos, dolores de cabeza, hipotermia leve, fatiga, confusión, pesadillas y presión arterial baja. Y en los casos más graves, incluso la muerte.