Leonor Paqué, periodista y superviviente de la pederastia de un sacerdote en Bilbao: “Ese trauma se queda de por vida, se queda el olor”

Leonor Paqué presenta su documental ‘Hermana Leonor, 20.000 kilómetros de confesión’, un viaje en coche por carretera para conocer y dar voz a otras víctimas de la Iglesia
El Vaticano abre una investigación por pederastia contra Rafael Zornoza, obispo de Cádiz y Ceuta, por presunto abuso sexual a un menor
En plena polémica por el caso de Rafael Zornoza, el obispo de Cádiz acusado de agredir sexualmente a un menor en los noventa, conocemos la historia de Leonor Paqué, periodista y superviviente de pederastia que presenta su documental ‘Hermana Leonor. 20.000 kilómetros de confesión’, un viaje en coche por carretera para conocer y dar voz a otras víctimas de la Iglesia.
Leonor tenía ocho años cuando ingresó en el sanatorio infantil Santa Marina en Bilbao. Allí, un sacerdote abusó sexualmente de ella. “Venía a las habitaciones cuando él quería, elegía una cama, te sentaba y nos agredía”, recuerda. “Ese trauma se queda de por vida, se queda el olor”, expresa.
Ahora, en el documental ‘Hermana Leonor. 20.000 kilómetros de confesión’, en el que ha recorrido 20.000 kilómetros para conocer dar voz a otras víctimas, señala directamente a su agresor.
Considera que el perdón es insuficiente
“Están esperando que la Iglesia, que la sociedad les reconozca: ‘Sí, fuisteis agredidos, atravesó vuestra vida y tenéis a un religioso incrustado en vuestros genitales y en vuestro cerebro todavía hoy”, dice.
Paqué lamenta que cuando sale un caso a la luz, la Iglesia “lo primero que hace es negar. Niega y aparta”.
Para ella, el perdón no es suficiente. “A mí no me pidas perdón, a mí haz algo que me muestre que de verdad lo que habéis hecho y lo que estáis haciendo os pesa”, manifiesta, porque “queremos saber qué nos hicieron, por qué, quién lo encubrió”.
Preguntada por la reparación que aún no ha llegado y que podrían necesitar, asegura que, en su caso, quiere “todo”: “Quiero que haya justicia y justicia es que la Iglesia salga a decir: ‘Sí, esto ocurrió’. Y quiero que haya reparaciones, mejórame la vida. Me lo debes”.
