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La Guardia Civil ha detenido a un hombre de 36 años residente en la localidad de Las Gabias (Granada) al ser identificado como presunto autor del secuestro de una mujer por la que habría pedido un rescate a su marido de 5.000 euros y de la que habría intentado abusar sexualmente.
Según el comunicado difundido por la Benemérita, el detenido que dispone de antecedentes policiales deberá responder por los supuestos delitos de secuestro, lesiones, abusos sexuales y atentado a agentes de la autoridad.
La mujer desaparecida, rehén del acusado, permanecía en el interior de un local en la calle Marqués de Mondéjar de la localidad andaluza hasta el momento que fue liberada por el Instituto Armado y la Policía Nacional.
Una llamada al Servicio de Emergencias 112 por parte del marido de la víctima que había sido secuestrada por un hombre que le pedía a cambio de dejarla libre la cantidad de 5.000 euros, advirtió que no avisaran ni a la Guardia Civil ni a la Policía, o de lo contrario el delincuente "mataría a su esposa".
La mujer acudió a una cita en un hospital granadino durante la mañana del día 27 de mayo. Al parecer el presunto secuestrador se encontró con ella a la salida de la consulta y la llevó hasta un local que posee en la calle Marqués de Mondéjar de Granada. Allí intentó abusar sexualmente de ella y al no conseguirlo, le quitó el teléfono móvil, la maniató a una silla y la amordazó, y se puso en contacto con el marido para exigir un rescate por ella.
El implicado cayó en la trampa iniciada por la Guardia Civil en el que por medio de una llamada telefónica con el marido de la víctima, este acudiese a las inmediaciones de un céntrico centro comercial para depositar el dinero dirigido al rescate, momento en el que el equipo de agentes le increpó y fue detenido tras haber intentado huir con su motocicleta.
En el forcejeo con el detenido ambos guardias civiles resultaron heridos. La Guardia Civil solicitó ayuda del Cuerpo Nacional de Policía de Granada.
Tras requisarle las llaves del local donde tenía retenida a la víctima, el grupo de agentes acudió en busca de la mujer a la que encontraron con signos de heridas de carácter leve. Entre los indicios presentaba un hematoma en el tabique nasal, eritemas en cara y cuello y eritemas circulares en ambas muñecas, consecuencia del forcejeo que había tenido con su secuestrador.