Dos detenidos y cinco investigados por organizar la 'rave' ilegal en Llinars del Vallès

  • Los detenidos pasarán a disposición judicial en las próximas horas

  • Los asistentes se enfrentan a sanciones de hasta 3000 euros

  • La multa para los organizadores puede ascender a los 600 000 euros

Los Mossos d'Esquadra y la Policía Local de Llinars del Vallès han detenido a dos personas -- una holandesa de 29 años y un chico de Tarragona de 22-- e investigan a otras cinco por organizar la fiesta ilegal la 'rave' en una nave abandonada que empezó en Nochevieja y que los agentes han desalojado este sábado. Los individuos se enfrentan a multas de hasta 600 000 euros.

Los detenidos pasarán a disposición judicial durante las próximas horas, según ha informado la policía catalana en un tuit.

Sanciones de hasta 600 000 euros

En declaraciones a los medios, el director general de los Mossos, Pere Ferrer, ha explicado que los asistentes se enfrentan a sanciones de hasta 3 000 euros, mientras que para los organizadores la multa puede alcanzar los 600 000 euros "por incumplir la normativa" para prevenir contagios de Covid-19, de acuerdo con el decreto ley aprobado por el Govern sobre el régimen sancionador que regula la tipología de las infracciones que contravienen la normativa.

Por otro lado, los Mossos y la Policía Local de Llinars han finalizado el desalojo de la nave abandonada en la que se ha celebrado esta fiesta ilegal.

Un operativo de más de 200 policías

Ferrer ha explicado que más de 200 policías de diferentes unidades participan en el operativo que se ha puesto en marcha este mediodía para desalojar esta 'rave', que comenzó el pasado jueves en una nave abandonada y que ha durado más de 40 horas.

Toda la información recabada por los Mossos sobre estos hechos será remitida al juez para que se depuren responsabilidades penales si es preciso.

"De aquí nadie se escapará sin asumir su responsabilidad", ha declarado Ferrer, que ha destacado la "complejidad" del operativo puesto en marcha en Llinars, que era "imposible afrontarlo la noche de Fin de Año o ayer".

Unas 300 personas, buena parte de ellas procedentes de otros países europeos, se congregaron la Nochevieja en esta nave de Llinars para celebrar durante varios días el nuevo año.

Al tener conocimiento de los hechos, los Mossos establecieron el mismo 31 de diciembre un dispositivo centrado en minimizar la movilidad de los asistentes y evitar nuevas entradas.

La prioridad en ese momento, ha destacado Ferrer, era "garantizar la seguridad de los 7,5 millones de habitantes de Cataluña" con los más de 3 000 agentes desplazados por todo el territorio.

Dada la magnitud de la fiesta y la imposibilidad de concentrar todos efectivos necesarios en Llinars, pues, la policía catalana decidió no realizar una "operación precipitada" y posponer el desalojo.

"Ayer tampoco se hubiera podido producir (el desalojo) con todas las garantías, ni para los asistentes ni para la policía", ha detallado Pere Ferrer.

"Había que planificar un dispositivo con cara y ojos para que de aquí no se fuera nadie sin pagar su responsabilidad", ha subrayado.

215 asistentes identificados

El consejero de Interior, Miquel Sàmper, y el mayor de los Mossos, Josep Lluís Trapero, han explicado en conferencia de prensa esta tarde en Barcelona que de los 215 asistentes indentificados, 100 son españoles, 35 franceses, 10 italianos, 3 andorranos y hay otros participantes procedentes de Austria, Países Bajos y Luxemburgo.

Trapero ha detallado que no han podido ser identificados todos los asistentes a la macrofiesta -unos 300- porque algunos de ellos "han huido campo a través".

Sàmper ha añadido, además, que se han practicado 61 pruebas de alcoholemia, todas ellas con resultado negativo, además de otras por consumo de drogas, y que se han tramitado también una treintena de actas por cuestiones como tener el carné de conducir caducado o inspecciones técnicas de vehículos desfasadas.

Los efectivos del Sistema de Emergencias Médicas (SEM), por su parte, han tenido que atender a dos de los asistentes.

Una holandesa y un chico de Tarragona, los dos detenidos

Los detenidos, según el mayor Trapero, son una holandesa de 29 años y un chico de Tarragona de 22, ambos vinculados a los servicios y equipos de música usados en la fiesta. Los otros cinco imputados son un holandés, dos franceses y dos italianos.

Trapero ha puntualizado que los Mossos llevan apenas cinco horas investigando cómo se organizó la fiesta, pero que en principio se sabe que estaban conectados por mensajes y que se conocían de eventos anteriores. También ha precisado que no se ha tramitado denuncia por ocupación ilegal de la nave en la que se celebró la fiesta.