Un estudio detecta la presencia de antibióticos en ríos españoles y franceses

  • El análisis Institut Català de Recerca de l'Aigua (Acra) también señala que este problema alcanzará el 65% del cauce de los ríos en 2050

El río Aragón Subordán, afluente principal en el Valle del Ebro, ha sido uno de los ríos que el análisis OutBiotics, coordinado por la Universidad de Zaragoza, ha puesto en cuestión tras hallar en su interior gran cantidad de un componente químico debido al uso de medicamentos. El mismo experimento ha localizado este mismo problema en otros caudales de los veinte restantes así como en el sur de Francia, sin embargo, no ha sido relacionado con un percance de "gravedad" para la salud ya que la cantidad presentada aún "no es excesiva". Otros estudios similares como el realizado por el Institut Català de Recerca de l'Aigua (Acra) alertan que la presencia de fármacos ocupará en el año 2050 un 65 % de los ríos.

“Se han detectado restos de hasta seis grupos de antibióticos pero en concentraciones que no tienen, hasta donde hoy se conoce, ninguna implicación en la salud humana, pero que sí apuntan a la necesidad de perfeccionar los sistemas de eliminación de antibióticos en las plantas depuradoras para mejorar la calidad del agua que va destinada a los cauces naturales”, señala Juan Ramón Castillo, catedrático emérito de Química Analítica de la Universidad de Zaragoza y coordinador del proyecto OutBiotics.

El proyecto ha sido respaldado entre tres grupos de investigación de la Universidad de Zaragoza: Grupo de Espectroscopía Analítica y Sensores, Grupo de Agua y Salud Ambiental, ambos del Instituto de Investigación en Ciencias Ambientales (IUCA) e investigadores del Dpto. de Producción Animal y Ciencia de los Alimentos, junto a otros de la Universidad de Navarra, de Lleida, el IPREM-CNRS de Pau y las empresas Laboratorios Enosan SL, Nilsa y PSI.

Impulsado y cofinanciado por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER), el programa Interreg V. tiene como objetivo el diagnóstico del contenido de antibióticos en ríos del territorio Poctefa (España-Francia), el desarrollo de nuevos nanobactericidas para su uso en producción animal y el estudio de nuevas técnicas de eliminación de antibióticos en procesos de depuración de aguas residuales, entre otras metas.

Evaluación del estado de los cauces nacionales

Los ríos y afluentes que se han analizado en la zona de Navarra son: Aragón, Irantzu, Arakil, Queiles, Arga, Ega, Bidasoa y Ebro en los que se han tomado muestras en las zonas de salida y entrada de algunas depuradoras en Estella, Pamplona, Tudela y Bera.

En la comunidad aragonesa, por su parte, se ha observado el estado de los ríos Alcanadre, Aragón Subordán (el que más cantidad de medicamentos presentaba), Cinca, Clamor Amarga, Flumen, Arba de Riquel y Gállego.

También se han analizado por cercanía el caudal de los ríos franceses destacando la evolución del río L’Adour, Le Gabas, La Garonne, La Save, L’Echez y La Baïse, en las zonas de Pirineos Atlánticos, Alta Garona y Altos Pirineos.

Seis tipos de antibióticos distintos hallados

El mismo estudio ha clasificado los medicamentos obtenidos en seis modelos diferentes: Fluoroquinolonas, Macrolidos, Sulfonamidas, Lincosamidas, Tetraciclinas, y Beta-lactamas mediante técnicas analíticas de última generación de extraordinaria sensibilidad (partes por trillón), desarrolladas por el grupo de la doctora Joanna Szpunar, del IPREM-CNRS de Pau.

El estudio de la presencia de resistencias antimicrobianas llevado a cabo por el Departamento de Microbiología de la Universidad de Navarra revela la presencia de algún tipo de resistencia antimicrobiana por lo menos a una categoría de antibióticos (ensayados cefpodoxima, cefoxitina, vancomicina, Colistina, Carbapenem) que, aunque no pone en peligro la salud humana, debe ser "revisado" progresivamente para no dañar el ecosistema ni que el problema persista o al menos reducirlo.