Condenan a 47 años de prisión al hombre que mató a su exmujer y exsuegra en Vitoria

  • La Audiencia de Álava condena a 47 años de cárcel al acusado de matar a su exmujer y su exsuegra en Vitoria

  • El hombre degolló a su exmujer y después a su exsuegra, prendió el piso en llamas e intentó suicidarse

  • La sentencia es "histórica" por aplicar el agravante de género al crimen contra su exsuegra

La Audiencia de Álava ha condenado a 47 años de cárcel al acusado de matar a su exmujer y a su exsuegra en Vitoria en abril de 2018. Se le han aplicado todas las agravantes que pedían las acusaciones y no han apreciado la eximente incompleta de trastorno mental transitorio.

De esta forma, la titular de la Sección Segunda de la Audiencia de Álava ha estimado las agravantes solicitadas por las acusaciones, que pedían 50 años de cárcel, frente a los argumentos de la defensa que reclamaba inicialmente 8 años de prisión por dos delitos de homicidio con la atenuante de trastorno mental transitorio.

La magistrada se ha basado en el veredicto emitido el pasado miércoles por el jurado popular, que consideró al acusado autor de un doble asesinato con las agravantes de alevosía y ensañamiento, que en el caso de la exmujer de la víctima fue de carácter físico y en el caso de la exsuegra fue psicológico, por el daño moral que le produjo ver cómo mataba a su hija.

Además le impone la agravante de razón de género para ambas víctimas, no solo para su expareja sino también para la madre de esta por ser mujer, por el rol matriarcal que ejercía como eje vertebrador y cuidadora de la familia, y por el apoyo que prestó a su hija en el proceso del divorcio.

El hombre mató a su expareja, a la madre de esta e incendió el piso

El hombre, de 46 años, degolló a su exmujer y a la madre de esta en el piso en el que ambas vivían en Vitoria. Tras esto, el exmarido de la víctima prendió fuego al piso e intentó suicidarse lanzándose desde un octavo piso, pero cayó sobre una colchoneta hinchable. La pareja estaba en trámites de separación.

En el juicio, el acusado ha admitido que "se le fue un poco la olla" y sacó un cuchillo porque pensaba "hacerse daño". La acusación remarcó que actuó con ensañamiento, ya que trató de que ambas vieran cómo la otra moría.

Las acusaciones de este caso han precisado que el procesado ha sido condenado a 24 años de cárcel por matar a puñaladas a su exmujer y a 23 por el de su exsuegra, y se han felicitado por esta sentencia, basada en un veredicto que la Asociación Clara Campoamor calificó de "histórico" por aplicar la agravante de género al crimen cometido contra la madre de su expareja.