La Albufera libera agua al mar para bajar su temperatura y tiñe de marrón las playas cercanas

El Parque Natural de la Albufera, Valencia. Telecinco
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Ante el aumento de la temperatura del agua en la Albufera de Valencia, el Gobierno autonómico ha decidido permitir el paso de agua del mar para ayudar a que esa temperatura pueda bajar. Esta medida está provocando la salida de agua embarrada al Mediterráneo, lo que ya está afectando visiblemente a las playas cercanas.

Las autoridades han pedido comprensión ante la necesidad de proteger este espacio natural, que ha sufrido las consecuencias de la reciente DANA. De verde a marrón, así ha cambiado el color del agua en la Albufera. La parte interior muestra ese tono marrón, y si se observa más de cerca en las compuertas, incluso puede llegar a parecer negra, argumentan algunos bañistas.

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La situación responde a una consecuencia directa de la DANA, que ha elevado la temperatura del agua en la laguna hasta los 32 grados. Este aumento está influyendo negativamente en el estado ambiental del parque.

Ampliación del horario de desagüe

El sistema de gestión del agua en la Albufera es peculiar: cuenta con unas compuertas conocidas como "golas", que permiten desaguar el parque. Hasta ahora, se abrían solo por la noche, pero este método se ha demostrado poco efectivo ante las circunstancias actuales. Por ello, se ha decidido ampliar el horario de apertura.

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La Junta de Desagüe actúa cuando considera que es necesario dejar salir el agua y que el proceso puede funcionar, lo que conlleva directamente la expulsión de esa agua hacia las playas.

Los efectos ya se notan en la costa. El agua del mar vuelve a llevar a la arena restos de la riada, mientras las playas muestran una tonalidad marrón que hace que algunos bañistas se replanteen su estancia. Lo que se pretende resolver por un lado, termina generando molestias por otro.

Quejas de vecinos

Algunos vecinos y bañistas de las playas de la zona no están de acuerdo.  La presidenta de la Asociación de Vecinos del SalerAna Gradolí, afirma que "es comprensible que el calor afecte a la albufera, pero creo que hay otras horas, por ejemplo de madrugada, cuando sopla el viento de poniente y se podrían aprovechar para abrir compuertas y podrían vaciar agua sin problema".

En este sentido, Gradolí argumenta que "se cumplirían la necesidad de vaciar sin perjudicar a los bañistas, entre ellos muchos niños y personas de todas edades y condición que llegan a las playas y ven que las condiciones del mar hacen imposible bañarse".

 "Hay muchas personas que soportan horas de atascos para llegar a la playa huyendo del calor de la ciudad y al llegar se encuentran el mar en mal estado", apunta Gradolí.