Adara Molinero monta una nave espacial para su hijo Martín en el jardín de su casa

Adara Molinero se ha propuesto convertir el jardín de su casa en un auténtico parque de atracciones para su hijo Martín. Con la llegada del buen tiempo, la que fuera ganadora de 'Gran Hermano VIP' se ha puesto manos a la obra para ofrecerle a su pequeño un sinfín de aventuras desde el patio de su casa. Tanto, que la madrileña le ha montado a su retoño una nave espacial desde la que dar rienda suelta a la imaginación.

Que los niños son capaces de imaginar en un palo una infinidad de posibilidades repletas de magia e ilusión, es un hecho. Por eso, Adara ha querido potenciar esa faceta tan característica de los niños en la edad de Martín (acaba de cumplir dos añitos) con un divertido despliegue en su jardín del que ya ha presumido en su perfil oficial de Instagram.

Aunque, de momento, no es ni por asomo lo que la exazafata de vuelos había planeado para su peque, lo cierto es que su hijo en común con Hugo Sierra está feliz y encantado con su nueva caseta que hace las veces de nave espacial desde la que viajar al espacio. Vamos, el sueño de todo niño.

"Tengo que volver. De momento solo tenemos la nave, pero le encanta", ha reconocido la ganadora de 'Gran Hermano VIP', que ha dedicado a sus seguidores un 'tour' de lo más detallado por este nuevo rincón de su jardín. Un jardín que, por cierto, está en pleno auge. Y es que hace tan solo unos días, la de Madrid presumía de huerto, repleto de árboles frutales: desde limoneros, hasta una higuera.

Y es que todo apunta a que la exconcursante de 'GH' se ha sumado a esta oleada de 'celebrities' que están poniendo a punto sus jardines de cara al verano, que ya está esperando a la vuelta de la esquina. Desde Belén Esteban con su parcela -con guiño a Andrea-, pasando por Toñi Moreno o Isa Pantoja.

Eso sí, Adara Molinero ha decidido dedicar este espacio tan acogedor para su hijo, al que le ha montado una preciosa caseta de tela que recrea una nave espacial al más puro estilo Neil Armstrong y desde la que Martín ya se divierte soñando con poner un pie en Marte. Con puertas desplegables, ventanales, rejillas y una buena explosión de color para tener la experiencia completa de un viaje por el espacio.