Laura Campos, de 'Gran Hermano', se despide desolada de su pequeño: "Vuela alto, amigo"
La ganadora de 'Gran Hermano 12' llora la muerte de su compañero de vida
Laura Campos se ha visto obligada a sacrificar a su animal, que llevaba un tiempo enfermo
Laura Campos no atraviesa su mejor momento. La que fuera ganadora de 'Gran Hermano' acaba de perder a su compañero de vida, su perrito. El can, que arrastraba una larga enfermedad relacionada con su sistema nervioso, ha tenido que ser sacrificado para evitar prolongar su sufrimiento. Un duro golpe para la influencer, que ha grabado unos vídeos rota de dolor en los que se ha despedido desolada de su pequeño.
La de Parla lleva varias semanas temiéndose lo peor, ya que a pesar de la fuerte medicación que le administraban su salud no mejoraba. "Lo hemos intentado todo, le hemos operado, le hemos dado un montón de medicación diaria y su sistema nervioso no respondía. El perro no podía continuar así y los demás, que estábamos al lado, tampoco", ha señalado la que fuera ganadora de 'GH 12'.
Su pequeño era uno más entre los suyos. "Era parte de mi familia", ha señalado la madrileña entre lágrimas a través de unas devastadoras historias de Instagram en las que se ha dejado ver completamente rota, compartiendo con su público el profundo dolor que siente y el vacío que le ha dejado la marcha de su animal.
"El llegar a casa y ver su camita vacía y sus cosas…se me parte el alma", ha señalado con la voz temblorosa en medio de su desconsolado llanto. Pero sacrificarle era lo mejor que Laura Campos podía hacer por su mascota. "Estaba enfermo y ayer tuvimos que tomar una decisión: le tuvimos que sacrificar. Es muy duro", ha explicado la que fuera pareja de Marcelo, también conocido como 'el malaguita'.
Pese a su dolor y su voz quebrada, la que fuera ganadora de 'Gran Hermano 14' ha querido dedicarle a su compañero de vida unas últimas palabras de cariño y agradecimiento por todos estos años que han pasado juntos. "Vuela alto, amigo", ha escrito Laura Campos dando el último adiós a su pequeño, que con su marcha la ha dejado completamente descorazonada.
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